Lisboa, en sí misma
lisboa, no se puede definir en palabras. La tienes que vivir, la tienes que conocer, la tienes que sentir para saber quién es Lisboa. Para muchos es la capital portuguesa, pero para quien la conoce de verdad, es una mezcla de sensaciones que no quieres de dejar de experimentar nunca.
Lisboa es vida. Es ese libro que no te cansas de leer.
Lisboa, es perderse y reencontrarse. Perderse en sus atardeceres. Perderse en sus calles. Perderse conociendo a su gente.Perderse escuchando su música. Y es reencontrase con la paz, con la tranquilidad, con la satisfacción.
Lisboa, para unos, Lisbon, para otros. Pero Lisboa para todos.
Lisboa con su historia y su cultura. Lisboa, en sí misma. Con sus pequeñas cosas y sus grandes monumentos. Lisboa, allí donde el tiempo se detiene.
Lisboa con su historia , con su cultura., con su arquitectura,con gastronomía y su arte. Lisboa, en sí misma. Con sus pequeñas cosas y sus grandes monumentos.
Lisboa, allí donde el tiempo se detiene. Donde el amor no entiende de nada,salvo de amor. Donde la felicidad se esconde detrás de cada esquina. Donde cada rincón contiene un secreto por decubrir. Donde la vida se ve de otra manera. Donde la gente camina sin prisas.
Lisboa, una fotografía en blanco y negro. Un recuerdo permanente.De esos que dejan huella y te dejan sin aliento. Un recuerdo mágico, de esos que cuestan creer si fue real o fue soñado.
Lisboa ,la ciudad del orden y el equilibrio