VIDAMÉDICA / DERECHOS HUMANOS
el uso de balines para el mantenimiento del orden público en
el marco de protestas.
Según el catastro del Instituto Nacional de Derechos
Humanos (INDH) obtenido gracias a la fiscalización de ob-
servadores en manifestaciones, recintos hospitalarios y
comisarías, tras 26 días de manifestación (al cierre de esta
edición) se había registrado en Chile: 2.365 heridos, de los
cuales 217 correspondían a trauma ocular, 774 por disparo,
400 por arma de fuego no identificada y 1.104 por golpes y
gases; y se habían presentado 335 acciones judiciales, que
incluían querellas por homicidio, violencia sexual, lesiones y
tortura, entre otros.
Desde el inicio de las protestas callejeras, el 19 de octubre,
el Departamento de Derechos Humanos del Colegio Médico,
liderado por el doctor Enrique Morales, trabajó sin descan-
so para prestar ayuda a las víctimas de violaciones a los
Derechos Humanos. A través de redes sociales, se viralizó rá-
pidamente una información que invitaba a quienes sufrieran
vulneraciones de derechos por parte de agentes del estado, a
realizar constatación de lesiones a través del Dpto. de DDHH
del Colmed. Sin embargo, tuvo que ser aclarado, debido a que
los organismos oficiales para constatar lesiones son los servi-
cios de urgencia de la red asistencial de salud y en el caso de
agresiones sexuales, el Servicio Médico Legal, que cuenta con
un sistema de atención de urgencia. En dicha oportunidad -y
ante las numerosas consultas recibidas por distintas vías-, se
aclaró que el apoyo que brinda esta instancia es el de hacer
informes médicos de denuncias de vulneración de derechos
humanos de personas que relatan haber sufrido tratos crue-
les, inhumanos, degradantes o tortura, por agentes del Estado.
Para facilitar este proceso, se dispuso de un formulario web
para denuncias en el sitio web del Colegio y de un protocolo
para médicos y miembros del equipo de salud que quisieran
apoyar con estos informes o hacer llegar la información para
registro.
A pesar de la gran cantidad de solicitud de informes médicos
de lesiones, las cifras entregadas por la autoridad durante los
primeros días hablaban de un número bajísimo de civiles heri-
dos, generando ruido entre los peritos del departamento, pues
no coincidía con la demanda que ellos estaban recibiendo.
Ante este escenario, el Colegio Médico comenzó a denunciar
un “cerco informativo” y se hizo un llamado a que el levanta-
miento de información por parte de los servicios de salud fue-
ra lo más transparente posible, lo que mejoró notablemente
con los días.
“Los lesionados difieren de los totales entregados por el
Gobierno con respecto a lo que podemos observar en una pe-
queña muestra que hemos tomado en la Región Metropolitana.
Establecer un cerco informativo y no tener la transparencia
debida, es ser cómplice de la vulneración de DDHH genera-
lizada que está ocurriendo en el país”, denunció el 23 de oc-
tubre el Dr. Enrique Morales ante la Comisión de Derechos
Humanos del Senado.
{ 21
EL CASO DE JOSUÉ
El Colegio Médico de Chile condenó también la violencia se-
xual y tortura que sufrió Josué Maureira, estudiante de me-
dicina de la Universidad Católica, por parte de Carabineros
de Chile, quienes lo detuvieron el día 21 de octubre en la 51°
Comisaría de Pedro Aguirre Cerda, y luego lo trasladaron a la
Cárcel Santiago 1. El joven se encontraba realizando primeros
auxilios, en el contexto de las manifestaciones.
En la tarde del Lunes 28 de octubre se realizó una concentración
a las afueras de la Fiscalía Metropolitana Sur en San Miguel,
en apoyo del joven. Colmed se hizo presente en la instancia a
través de los Departamentos de Género y Salud y de Derechos
Humanos, junto a la agrupación Médicos Generales de Zona.
EL COMPROMISO DEL COLMED POR LOS DDHH
A menos de una semana del inicio de las manifestaciones, el
Departamento de Derechos Humanos fue requerido por las co-
misiones de la materia del Senado y la Cámara de Diputados.
El día 23 de octubre, presentó un balance que, de acuerdo a la
experiencia en estas situaciones, evidenciaba que “no hay res-
peto a las normas de procedimientos de las policías y normas
militares. Están vulnerando derechos”.
El Colegio también unió fuerzas con la Sociedad Chilena de
Oftalmología para solicitar suspender uso de balines por parte
de Carabineros y FF.AA., a raíz de las preocupantes cifras de
trauma ocular severo. El presidente del gremio oftalmológico,
el Dr. Dennis Cortés, señaló que estos casos, en su mayoría
irreparables, “constituyen una emergencia sanitaria que debe-
mos enfrentar” y que se debían cambiar los protocolos.
Colmed también entregó antecedentes sobre vulneraciones de
Derechos Humanos en reunión con Amnistía Internacional,
organización representada por Ana Piquer y Pilar San Martín,
investigadora del equipo de crisis, quien valoró la información
entregada, pues “viene directamente de personal médico, de pe-
ritos que están enfrentando cada día esta situación y que ven
directamente a los pacientes”. En cuanto a las cifras, afirmó que
“son bastante impactantes. Nos han explicado cómo han regis-
trado que la mayoría de las localizaciones de las lesiones están
en zonas letales, como en la cabeza y la parte del tórax, eso
es muy preocupante, porque significa que tenemos una fuerza
pública que está disparando a dañar. Eso es de suma gravedad”.
Igualmente, los primeros días de noviembre, el Dpto. de DDHH
del Colegio Médico de Chile, participó de una reunión con mi-
sión de la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas
para los Derechos Humanos para entregar información a los
observadores del organismo sobre los casos de vulneración
durante las manifestaciones por parte de agentes del Estado.
Más de 100 organizaciones no gubernamentales y represen-
tantes de la sociedad civil participaron del encuentro.
Finalmente, el Departamento de Derechos Humanos trabajará
en la elaboración de un informe que sirva de insumo para que
estos actos sean reparados por parte del Estado y que contribu-
yan a que no se vuelvan a repetir hechos de este tipo.