30 Vida Médica
entrevista
“Para el futuro me
veo participando
desde el lugar
donde esté.
Donde me
permitan seguir
trabajando”.
La Dra. Begoña Yarza y Dra. Nelly Letelier junto a la Dra. Paiva en la premiación del Día de la Mujer.
La acompaña también el Dr. Jorge Villegas , su marido.
de la Asamblea de la Civilidad, acusaron éticamente a quienes participaron en torturas
hasta el día de hoy cuando se preocupa por
el trabajo médico, departamento que dirijo
por dos períodos. Es una instancia donde
se puede trabajar y opinar para ser partícipe en la construcción de un mundo mejor.
Las personas deben buscar un lugar donde
opinar y hacer valer su opinión y eso ha sido
para mí el Colegio Médico”.
Destacado ha sido también su trabajo en el
hospital de sus amores en el que hoy ocupa
el cargo de Jefa de Pediatría, “pero sin dejar
los turnos”, recalca. Es que la Dra. Paiva desde que ingresó al Exequiel pudo vivir el amor
por la medicina pero desde una perspectiva
distinta. Recuerda con emoción cuando conoció al Dr. Guido Girardi Briere, quien fue
su maestro, no sólo en su especialidad, sino
también cuando años más tarde realiza la
subespecialidad en bronco pulmonar.
De inmediato la invitó a trabajar en el programa de Infección Respiratoria Aguda
(IRA) con la comunidad de la zona sur de
Santiago, en poblaciones de alto riesgo
como La Legua en los consultorios de San
Joaquín donde los niños se morían en sus
casas sin atención médica, asumiendo como
suya la máxima de que el mejor paciente es
el que está en la casa, no en el hospital. “Me
pareció un hermoso desarrollo de la medicina y que se refleja en no quedarse sólo en
el hospital, sino que abrirse a la comunidad
y enseñarles cómo cuidarse. Esta etapa me
marcó profundamente ya que entendí que
el ejercicio de la medicina tiene que ver con
entender que el enfermo hospitalizado representa una cadena previa que debía haberse resuelto antes”, afirma.
A esas alturas, habiendo pagado su beca en
el Hospital de Buin, luego becada en el Exequiel
y posteriormente a cargo del IRA para la
comuna de San Joaquín, ya con tres hijos
la vida le ponía un nuevo desafío: la separación y con ello la demanda de construir una
nueva familia donde debe compatibilizar su
labor de madre con el ejercicio médico y con
la formación de personas que aporten a la
sociedad. Hoy con orgullo dice que logró
su objetivo y que sus hijos finalmente son
hombres buenos que construyen.
Desde su vuelta al hospital donde realizó
la subespecialidad de bronco pulmonar
con el Dr. Girardi no ha parado más y sigue
con la misma fuerza asumiendo a diario
todos sus desafíos profesionales, personales y gremiales. “Para el futuro me veo
participando desde el lugar donde esté.
Donde me permitan seguir trabajando.
Ahora estoy aquí como jefa del servicio
de pediatría porque me parece hermoso el desafío de seguir construyendo en
este hospital. Me siento orgullosa de haber contribuido con el Colegio Médico a
que las autoridades se dieran cuenta de
la necesidad de un nuevo hospital para
la zona sur. Trabajo en el Minsal a cargo
de los programas respiratorios para entregar todo lo que he aprendido, estoy
feliz aportando desde el Departamento
de Trabajo Médico. Mis hijos son personas de bien y hace ya tres años he reencontrado el amor de pareja. Qué más
puedo pedir… sólo quiero seguir participando”.