64 Vida Médica
llorar. Nos deja a todos mudos. Vacarezza,
con una sabiduría, le dijo: ‘doctor, usted
desahóguese, todos podemos llorar algún
día, pero lo vamos a ayudar’. Y ahí se buscaron fórmulas para paliar, pero se trataba de 40 millones de esa época. Kléber no
quedó contento con eso: ‘Yo siento que le
dimos limosna a un ciego, porque perdió
no sólo plata, sino su prestigio. Han barrido el suelo con él, yo creo que esto nos
puede pasar a cualquiera’”, evoca el Dr.
Eurolo.
Eurolo y Monlezun se conocieron en Valparaíso cuando el actual presidente del
Consejo Regional participaba de la entonces recién estrenada revista “Panorama Médico” y el Dr. Monlezun visitaba a
colegas que requerían ayuda del Fondo
de Solidaridad Gremial. La preocupación
gremial está en el origen de esta historia
y se repite como una constante.
Autonomía
Sucesivas reuniones gremiales en 1994
abordaron cómo conciliar los aspectos
gremiales y legales con los aspectos éticos. El 13 de enero de 1995 se firmaron
los estatutos de la nueva Fundación, que
determinaron su primer directorio con
carácter transitorio y que estuvo compuesto por el Dr. Monlezun como presidente, el Dr. Fernando Espina como
vicepresidente, el Dr. Juan Eurolo como
tesorero, el Dr. Juan Maass como secretario y el abogado Jaime Varela Chadwick
como director. El 4 de julio el Consejo General de Colegio ratificó la constitución de
Falmed, y sus estatutos fueron aprobados
por el Ministerio de Justicia el 11 de julio,
obteniendo así su personalidad jurídica.
“En la Mesa Directiva se discutieron los
pro y contra, y se adoptó la siguiente
fórmula: que Falmed no fuera un departamento como el de Solidaridad Gremial,
sino una Fundación ajena al Colegio Médico, con otro RUT y con otro sistema de
organización. Se estimó que no era procedente que a un médico al que se le está
acusando de haber cometido una negligencia ܈[