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NUESTRAS
Vidal Garza Cantú
ELECCIONES
Las elecciones del pasado 6 de julio fueron muy nuestras. No solo por la participación que superó la marca de las elecciones intermedias de los pasados 20 años. También porque la ejecución de las mismas fue celebrada y llevada a cabo por la ciudadanía.
Mas de 1.4 millones de funcionarios de casillas, todos ciudadanos, que aportaron más de 45 millones de horas de trabajo sin recibir ningún pago a cambio fue uno de los resultados cívicos de esa jornada.
A pesar de que llegamos a estas elecciones cansados y preocupados, finalmente la fortaleza cívica se sintió en la mayoría de las casillas donde los mexicanos votamos. De un total de poco más de 163,000 casillas solamente no pudieron instalarse 300 por conflictos sociales, (162,896 fue el número final de casillas que recibieron votos el día de la elección).
Además, a pesar de que las campañas fueron manchadas por la violencia, la jornada electoral de ese domingo, sucedió en paz en la mayor parte de los lugares en donde se llevó a cabo la votación del País.
La participación electoral fue también importante. Superamos el abstencionismo de los últimos 20 años para una elección intermedia que, aunque no fue superior al 60 por ciento, sí mostró que el mecanismo electoral funciona. Es importante ahora estimular que el 40 por ciento que no participó se percate de la importancia de su voto y el daño que le genera a la sociedad el no ejercerlo.
El resultado final es la victoria institucional del INE como un importante bastión de nuestra democracia. En términos de victorias y derrotas el saldo para los partidos políticos fue balanceado. No todos ganaron todo, ni todos perdieron todo.
VIDAEMPRESARIAL