Ellos respondieron: -¡Pues no! , No nos vamos ir a ningún otra parte-,
Los tres niños muy tristes fueron a pedirle ayuda a su profesora, y ella estaba muy
de acuerdo con lo que le habían dicho a los chicos, ella les dijo a los niños que
estaban jugando:
- Si chicos, sus compañeros tiene razón, esta zona no es para jugar futbol, hay
muchas partes en las que pueden jugar libremente, además, pueden pegarle a un
arbolito o pisarlo-.
De esta manera, estos sembradores evitaron un accidente a algún árbol de esa
zona, los otros chicos muy arrepentidos dijeron:
- Perdón, no sabíamos el daño que podíamos hacerle a estos arbolitos, perdón, de
esta manera arreglaron el problema y ellos quisieron también defender los
arbolitos indefensos, sabiendo que podían hacerle daño otras personas.
Ellos se sintieron muy felices y hasta el día en que se vallan del colegio los
defenderá, y “Chapulín Colorado este cuento se ha acabado”.
FIN.
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