Veintiún Ángeles IED Adoptando un árbol | Page 23

SARAY CÁRDENAS CARDENAS ace mucho tiempo en un lejano bosque vivía un leñador, este leñador vivía muy solo cerca de la montaña, no le importaba las leyes que impedían la tala de bosques. Él no sabía cuál era la utilidad de los árboles, ni estaba consciente de lo que estaba haciendo, por esta razón se dedicaba a talar toda clase de árboles para sacar de sus troncos madera y venderlos; con ese dinero vivía bien económicamente; los vecinos siempre le decían el daño que estaba haciendo al medio ambiente, y más que todo que las personas como él iban a terminar acabando con el mundo y el oxígeno que proporcionaba el bosque. H Un día el leñador fue a talar y vio un árbol muy atractivo, lo primero que pensó fue en talarlo, aunque sentía un mal presentimiento; cuando se preparaba para talar vio una luz resplandeciente que lo hizo dormir y perdió el conocimiento, quedando profundo cerca del árbol que pretendía cortar. El leñador quedo sumergido en un profundo sueño que lo llevó a una situación contraria de lo que él hacía, cuando él despertó vio que él era un árbol frondoso muy grande y su cabello eran hojas de varios colores que reflejaban una hermosa primavera, sus brazos eran largas ramas, sus pies se convirtieron en raíces y el torso del leñador se convirtió en tronco, quedando su alma atrapada en ese bello árbol. Él al ver a su alrededor vio su cuerpo junto a sus raíces que se estaba moviendo, el cuerpo del leñador poseía el alma del árbol, ahora se habían intercambiado los papeles, ¡el leñador inexplicablemente era un árbol! El cuerpo del leñador le explico muy amablemente al árbol todo lo que él sentía cuando era talado, y que cambiar su posición se debía a una misión para que pudiera entender que talar no era adecuado y que él tenía que llevar a la humanidad el mensaje de que los árboles servían para muchas cosas, y eran los pulmones de la tierra… 21