JULIAN ESTIVEN AVILA AGUILAR
H
ace mucho tiempo una familia con mucho dinero tenía un hijo llamado
Morchis, al cual nunca le faltaba nada, todo lo que él pedía a sus padres
cuando era pequeño se lo daban; cuando fue creciendo se consiguió unos
amigos los cuales le dieron a probar mariguana, y él por experimentar nuevas
cosas acepto, al año de estar
consumiendo su familia quedo en
la pobreza de más bajo nivel, allí la
familia empezó a notar que su hijo
estaba consumiendo mariguana,
debido a que cada vez consumía
más seguido, esto para olvidar que
ya no podía tener todo lo que
antes sus padres le daban.
Un buen día los nuevos amigos
que tenía le propusieron empezar
a robar, diciéndole que así pronto
podía conseguir todo a lo que
antes
estaba
acostumbrado,
Morchis sin pensarlo dos veces acepto; fueron varios años en los cuales estuvo
robando y cada vez estaba más metido en la mariguana, por otra parte sus padres
estaban tratando de salir adelante, formaron una empresa de reciclaje, al ver que
nuestra ciudad cada día estaba más contaminada; empezaron a hacer campañas
para el buen manejo de las basuras y así poder crear en los ciudadanos una
conciencia de mantener la ciudad limpia, para ellos debíamos empezar por lo más
sencillo, Reciclar.
Sus campañas empezaron en los colegios, conjuntos, etc., de uno de estos colegios
que visitaron en donde se estaban sembrando unos árboles para mejorar el medio
ambiente en ese momento, tomaron la iniciativa de hacer charlas para concienciar
a los demás colegios sobre la importancia de cuidar el medio ambiente.
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