#vamosjuntos Nº 2
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como fuente de nuevos ingresos.
Abogábamos por la creación de
servicios de empelo para colectivos
con especiales dificultades como
jóvenes y mujeres y ninguno de estos
dos colectivos han visto mejorar su
situación sino todo lo contrario.
Proponíamos modernizar la bolsa de
empleo municipal, promover medidas
para mejorar la seguridad laboral,
(...). Volveremos a hacerlo.
Ahora nos dicen que ya todo pasó.
Nos cuentan mientras nos enseñan
recortes de prensa internacional que
la crisis en España ya es historia. Y
para que la mentira cale se inventan
un eslogan que poder reproducir
como un mantra cada vez que se
acercan a un micrófono o a un
teclado: en la buena dirección.
Han pasado más de dos años desde
aquel 2011 donde arrasaron electoralmente en España, en la Comunidad
de Madrid y en Arganda. Los cinco
millones de parados de Zapatero que
Rajoy utilizaba como arma arrojadiza
ahora son seis, pero tienen la desfachatez de decir que vamos en la
buena dirección.
Cuando en mayo de 2011 los vecinos
de Arganda decidieron renovar su
confianza en Pablo Rodríguez Sardinero los desempleados que se contaban en nuestra localidad eran 5.233.
Desgraciadamente la inacción está
siendo la tónica de esta legislatura y
por ese motivo hoy se alcanzan los
6.518. Un aumento del 24,55%, 1.285
nuevos vecinos en lo que llevamos de
legislatura.
No voy a negar que vayamos en la
dirección correcta, ahora bien,
vamos en sentido contrario.
Un éxito que nos anima a continuar
Ir e ne G ar c ía.
Una de las mejores noticias de estas
últimas semanas ha sido sin duda la
renuncia definitiva del Partido Popu-
lar a la privatización de la sanidad
madrileña tras el último revés judicial y el consiguiente cese en su
cargo del señor Fernández Lasquetty.
Una inmensa alegría es la que hemos
sentido miles de madrileños y madrileñas al conocerse la noticia y una
doble satisfacción para el Partido
Socialista de Madrid que con su
recurso ayudó a que la lucha en la
calle llegara a los tribunales.
Han sido muchos meses de movilización social y política, muchos meses
de lucha. Una lucha que ha unido a
profesionales de la sanidad, a ciudadanos y a políticos. No dejamos ni un
@iregm
solo segundo de pelear contra lo que
estábamos seguros iba a ser el
desmantelamiento de la sanidad
pública. Creo que todos los que
participamos de una manera u otra,
sentimos esa unión, esa fuerza que
da el saber que no estas solo que
hay miles de corazones latiendo por
una misma causa. La marea blanca
ha sido excepcional.
Pero no podemos parar ahora que la
sociedad ha cogido impulso. Hay
muchas cosas que cambiar. No
podemos permitirnos despertar una
mañana con una noticia como la de la
tragedia de Ceuta, o ver como la
solución a la inmigración pasa por
poner cuchillas en las vallas fronterizas. No podemos permitirnos abrir
el periódico y leer que una mujer ha
muerto en un Centro de Internamiento para Extranjeros por falta de
asistencia médica.
A mi personalmente la muerte de
Samba Martine me dejó helada. Una
muerte que se podía haber evitado.
Una mujer que llevaba más de un
mes encerrada en el CIE de Aluche
para ser expulsada del país y a la
que le negaron asistencia en repetidas ocasiones y a la que ni tan
siquiera trasladaron en ambulancia
al Hospital 12 de Octubre cuando su
estado era ya de extrema gravedad.
¿Que sociedad permite que sucedan
estas cosas?
¿Qué gobernantes permiten que
sucedan estas cosas?
Yo creo en la acción social unida a
una política transformadora. Creo
que hace falta mucha conciencia
social para gobernar. Y estoy segura
que desde la acción política se puede
ayudar a construir un mundo mejor.