Vaccea Anuario 2012 Sep. 2013 | Page 50

María Valdezate. Me identifico mucho con el yacimiento. Siento que es donde yo he nacido, la tierra que he pisado… Esconde muchas cosas, no es una tierra cualquiera, tiene debajo un montón de cosas y un montón de historias que hay que sacar y que podemos ver. Adelaida Sanz. Cuando éramos niños, íbamos a dar una vuelta, casi a estudiar con Don José. Nos llevaba arriba a Las Quintanas y nos iba explicando. En El Cenizal también hay zona arqueológica. Lo que pasa es que al coger las tierras, esa zona ha ido perdiendo un poco. Pero ahí también han salido cosas. Y cuando hicieron el canal, fue un expolio muy grande, porque entonces no había quien lo cuidara ni quien se preocupara. Entonces cada uno cogía lo que le parecía. ha dado ninguna importancia. Una de las razones que generan esta postura es, en mi opinión, una educación deficiente. No obstante, parece que las cosas cambian. Por una parte, el trabajo de campo arqueológico ha ido generando vínculos con las poblaciones en las que se ubican los yacimientos, y los arqueólogos tratan de involucrar a la sociedad en su labor. En este proceso, la difusión de la información y la capacitación de la población local juega un papel fundamental, posibilitando la toma de conciencia por parte de estas comunidades del rol del yacimiento en su vida. Por otra parte, la población local empieza a querer conocer su pasado, y a valorar y proteger los bienes materiales relacionados con el mismo. En esta evolución es importante la relación personal con el patrimonio, cuando el sujeto entiende las implicaciones de la preservación del mismo y lo valora dentro de sus vivencias personales y colectivas, cuando convierte el “universo arqueológico” en un “universo propio”. En este cambio también juega un papel primordial la visión de la Arqueología como elemento dinamizador de la vida social, cultural y sobre todo económico de las comunidades locales o propiciador del desarrollo sostenible de las mismas. El Patrimonio Cultural ha de utilizarse como medio de dinami- zación y desarrollo social y económico de la comunidad vinculada a cada territorio, según el Plan de Patrimonio Histórico de Castilla y León 2004-2012. El “arqueoturismo” puede ser un elemento de creación de riqueza, propiciador de la mejora de las condiciones de vida de las zonas rurales. En una sociedad como la castellano y leonesa, envejecida y con una visible despoblación rural, la Arqueología puede jugar un papel importante como generadora de recursos económicos y fijadora de población joven en nuestros pueblos. Y aunque pueda ser evidente que han de ser las administraciones públicas las que han de regular determinados aspectos para favorecer este proceso, es el empuje personal el que puede llevarlo adelante. Eso que ahora se da en llamar “espíritu emprendedor”. El 27 de agosto de 1987 el diario El Norte de Castilla publicaba un artículo sobre el yacimiento de Pintia. “El director de las excavaciones de Padilla de Duero —escribía el redactor— es optimista en cuanto a la vinculación de estos trabajos y la población padillense: los tres objetivos de toda experiencia arqueológica, la protección de la misma, la excavación científica y el disfrute público de los hallazgos —dice— se cumplen satisfactoriamente aquí”. En el mismo artículo, más adelante, escribe: “Coincidiendo con el ini- 50 6 cio de la presente campaña, el propio director de los trabajos y el arqueólogo territorial explicaron a los vecinos de Padilla de Duero los pormenores de esta iniciativa científica. En opinión de ambos, la toma de conciencia por parte de la población fue tan masiva como significativa”. Desde el comienzo de las excavaciones la línea a seguir en este tema estaba clara. La de Pintia ha sido siempre una excavación abierta a la sociedad. Las acciones llevadas a cabo para lograr esta “arqueología en sociedad” han sido numerosas: conferencias y cursos en el pueblo, visitas guiadas a la excavación, creación de la Asociación Cultural Pintia, etc. La vinculación de los arqueólogos y participantes en el Proyecto Pintia con Padilla es enorme. Pero un hito en esta relación ha sido la creación del CEVFW en Padilla de Duero en 2001, al permitir una relación total entre los arqueólogos y el pueblo. Los arqueólogos viven en el pueblo, son parte de esta sociedad. Realización del vídeo Zona Arqueológica Pintia. La memoria no escrita Pintado el panorama general, en el verano de 2012 nos lanzamos a realizar un nuevo vídeo para el Centro de Estudios Vacceos.