UTD Journal Volume 2, Issue 4, April 2014 | Page 12

* Si no estás dispuesto a darlo todo en todos y cada uno de los ejercicios. * Si crees estar en posesión de la verdad y nada ni nadie te va a hacer cambiar de opinión. * Si no estás dispuesto a abrir tu mente y aceptar que realmente las cosas se pueden bien desde el principio. En definitiva, si estás acostumbrado a que te regalen las cosas, a que otros hagan las cosas por tí, o ya lo sabes todo y no necesitas nada nuevo, ESTE NO ES TU CURSO. Pero si quieres asombrarte, conocer tu capacidad, aprender a ser mas eficiente debajo del agua y darte cuenta que sólo estas en el principio de un camino apasionante repleto de técnicas orientadas a la eficiencia y la seguridad, este curso es sólo el prólogo de todo lo que nos falta por aprender. Y sobre el último punto de hacer las cosas bien desde el principio, doy una explicación mas detallada. En la charla sobre los principio de UTD se comenta que uno de los principios de esta agencia es que se puede formar a los OWD desde el principio en cosas tan “avanzadas” como el TRIM y el aleteo eficiente y para ello muestran ejemplos de otras certificadoras haciendo ejercicios apoyados en el fondo, aleteando “como siempre” etc, etc, en definitiva, ejemplos de como nos han enseñado a todos a bucear, dejando lo del TRIM y el aleteo a formaciones superiores o experiencia conseguida a base de bucear con gente que te va formando poco a poco. Es claro que cuando te lo explican, directamente NO te lo crees, cuestionas ese planteamiento porque cualquier persona que empieza en éste mundo es un “pato mareado” que no sabe nada y sus inicios son dando aletazos a diestro y siniestro, cayendo al suelo, y del TRIM ni hablamos. Quiere la casualidad que el socorrista que estaba en la piscina nos preguntó sobre bautismos y ver como se podía hacer un curso de buceo y quiere la casualidad que, por la tarde, mientras estábamos en el curso, llegó otro club a realizar unos bautismos unas calles mas allá. Típicos bautismos de esos que vemos habitualmente y que son totalmente normales, panzadas en el fondo, aletazos, aleteos hiperrápidos para avanzar, etc, etc, etc. En un pequeño descanso que realizamos, nuestro instructor Iñaki De Santos le dice al socorrista si quiere realizar el bautismo, a lo cual responde que si, no sin antes advertir que no sabe nada de buceo y que nunca antes ha realizado actividad similar. No pude evitar mi asombro, cuando tras unas pocas instrucciones vemos al socorrista realizando unos “largos” de piscina a dos palmos del suelo y realizando la patada de rana. Al terminar el breve pero intenso bautismo, muestra su sorpresa porque el pensaba que el aleteo era como se veía en las películas y se mostró encantado con lo que había hecho, aunque esto último es común a todos los recién bautizados. Yo quedé impresionado porque la casualidad quiso que se nos demostrase, en vivo y en directo, que si alguien empieza bien desde el principio, simplemente hace lo que le dicen que es correcto, no cuestiona, no duda, simplemente lo hace. No hay vicios, no hay errores, sólo hay formación y explicaciones que efectuar. Buceador UTD