Nota editorial
No sé vosotros, pero yo me moría por saber qué había pasado después del final de
Túneles. Aunque estaba desesperado por cavar más profundo en todos esos misterios,
los autores sólo revelaban algunos datos aislados de nuevos personajes y susurraban
secretos sobre monstruos y extrañas inscripciones. «¡Contadme la historia, por
favor!», les supliqué. Hasta que por fin, lo hicieron.
Y es asombrosa.
Barry Cunningham