Caso Ismael:
• Evolucionó en el 100% de las pruebas del área 1 Autopercepción y el reconocimiento
de las emociones y los sentimientos.
Caso Valentín:
• Evolucionó en el 60% de las pruebas del área 1 Autopercepción y el reconocimiento de
las emociones y los sentimientos.
Caso Hernán:
• Evolucionó en el 80% de las pruebas del área 1 Autopercepción y el reconocimiento de
las emociones y los sentimientos.
Por último, la cuarta evidencia nos conduce directamente a un caso emblemático (Hernán), el
cual por distintos motivos se discontinuó su concurrencia al centro de salud donde concurría.
A raíz de ello, no se pudo aplicar pruebas de estimulación con la debida continuidad, todo lo
cual generó la pérdida de la eficacia del uso y aplicación de TIC con fines resilientes,
demostrado en los niveles de medición observados en las pruebas finales.
En conclusión, afirmamos que aquellos niños que recibieron pruebas de estimulación,
progresaron sensiblemente en comparación de los casos que no las recibieron.
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