Traveller´s Choise Edicion Piloto | Page 20

Reportaje

El placer

de viajar en Globo

La aerostación es la forma más antigua de volar, una de esas experiencias que se deben probar alguna vez en la vida. Desde aquel vuelo realizado por los hermanos Joseph y Etienne Montgolfer, hasta nuestros días el globo no ha variado la esencia de su vuelo.
Viajes en globo, que, únicamente, la tecnología y los nuevos materiales empleados en su construcción y las modernas técnicas de pilotaje, hacen de su empleo una forma mucho más segura y confortable. Aún a pesar de los veloces tiempos que vivimos, los globos siguen manteniendo inalterable su sensación de serenidad y su espíritu aventurero.
El primer globo fue fabricado por los hermanos Montgolfler en noviembre de 1.782, siendo el primer vuelo con pasajeros el 14 de diciembre de 1.782. Los dos primeros pasajeros fueron un pato y una oveja, los dos regresaron a la tierra vivos y coleando, siendo los protagonistas en una hazaña que iba a marcar historia. El 21 de noviembre de 1.783 Pilatre de Roziers y Arlandes fueron los primeros hombres que consiguieron volar por primera vez en un globo de aire caliente. La hazaña les llevó a una distancia de 1.000 m. en 28 minutos.
Desde entonces, el continuo afán de volar libre ha hecho del globo una aventura segura y fascinante. Una experiencia que se queda grabada en la memoria para toda la vida. Disfrutar de un paseo en globo no sólo no presenta ningún peligro sino que, según muchos expertos, constituye la forma más segura de volar. No en vano se toman todas las precauciones para que así sea. El riesgo puede considerarse nulo. Solo se vuela si las condiciones atmosféricas son favorables y las travesías se realizan con viento suave.
Cuando comienzan los preparativos con el inflado, comienza en si la aventura. No tienes más que relajarte y sentir el contacto directo y permanente con al naturaleza. Cualquier persona puede imaginar la maravillosa experiencia que puede suponer una travesía a bordo de un globo. Viajar en globo es, sobre todo sentir, es descubrir un mundo de sensaciones y placeres dentro del viento. Poder contemplar un amanecer suspendido en el aire es del todo emocionante. Se diría que quien se mueve no eres tú, sino la tierra, que parece alejarse bajo tus pies. Subir a un globo es dejarse volar, suave, ligera e imperceptiblemente.
Todo el mundo ha deseado alguna vez probar las delicias del vuelo con motor o la tranquilidad de dejarse transportar en una pompa gigante, quienes ya han tenido la suerte
20 | Travellers Choise Febrero 2017