TodoJapanistic Volumen 1 | Page 11

Página 11 Política Japonesa. Japón es una monarquía constitucional con un parlamento bicameral, el Kokkai o Dieta. El poder ejecutivo lo ejerce un Gabinete, responsable ante la dieta y compuesto por el primer ministro y ministros de estado, debiendo ser todos civiles. El primer ministro debe ser un miembro de la Dieta y elegido por la misma. Tiene el poder de nombrar y despedir a los ministros, de los que la mayor parte debe consistir en miembros del parlamento. La constitución atribuye la soberanía, que anteriormente recaía en elemperador, al pueblo japonés, quedando el emperador como símbolo del estado. La rama legislativa se compone de una cámara de representantes de 480 escaños, elegida por sufragio universal cada cuatro años, y unacámara de consejeros de 247 escaños cuyos miembros son elegidos por seis años. El sufragio es siempre universal y secreto para los hombres y mujeres mayores de edad (la mayoría de edad se establece en Japón a los veinte años). Dado que el emperador tiene un papel meramente simbólico, a veces se clasifica a Japón como una democracia parlamentaria. La creación de la Cámara de Representantes de Japón tuvo lugar tras la aprobación de la Constitución japonesa de 1889 en el marco de la revolución Meiji. En 1868, el final del Shogunato Tokugawa y el inicio de la Era Meiji supusieron el desarrollo de toda una serie de reformas económicas, sociales y políticas con las que Japón pretendía progresar como nación y equipararse a las potencias occidentales del momento.1 En este contexto, surgieron a partir de la segunda mitad de la década de 1870 diversos grupos de tendencia liberal que consideraban insuficientes las reformas emprendidas hasta el momento y que reclamaban mayores derechos además de la formación de un sistema de gobierno representativo. La presión al régimen fue en aumento hasta que en 1883 el emperador Meiji anunció la redacción de una constitución que entraría en vigor, como muy tarde, en 1890. La noticia descolocó al movi- miento liberal, que se fragmentó en numerosos partidos y perdió la fuerza que habría tenido de haberse mantenido unido. El proceso de elaboración de la constitución empezó en 1885 tras la creación de un gabinete ejecutivo presidido por Ito Hirobumi, un antiguo samurái. Ito estudió varias constituciones europeas y se decantó por el modelo prusiano, un país que tenía una posición destacable en Europa y un modelo parlamentario que se adaptaba a los intereses de Japón. Los japoneses querían una constitución que garantizase el poder imperial a la par que las instituciones y el juego político.