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Política Japonesa.
Japón es una monarquía constitucional con
un parlamento bicameral,
el Kokkai o Dieta. El poder ejecutivo lo ejerce un Gabinete,
responsable ante la dieta y compuesto por el primer ministro y
ministros de estado, debiendo
ser todos civiles. El primer ministro debe ser un miembro de
la Dieta y elegido por la misma.
Tiene el poder de nombrar y
despedir a los ministros, de los
que la mayor parte debe consistir en miembros del parlamento.
La constitución atribuye la soberanía, que anteriormente recaía en elemperador, al pueblo
japonés, quedando el emperador como símbolo del estado.
La rama legislativa se compone
de una cámara de representantes de 480 escaños, elegida
por sufragio universal cada cuatro años, y unacámara de consejeros de 247 escaños cuyos
miembros son elegidos por seis
años. El sufragio es siempre
universal y secreto para los
hombres y mujeres mayores de
edad (la mayoría de edad se establece en Japón a los veinte
años). Dado que el emperador
tiene un papel meramente simbólico, a veces se clasifica a
Japón como una democracia
parlamentaria.
La creación de la Cámara de Representantes de Japón tuvo lugar
tras la aprobación de
la Constitución japonesa de
1889 en el marco de
la revolución Meiji. En 1868, el
final del Shogunato Tokugawa y
el inicio de la Era
Meiji supusieron el desarrollo de
toda una serie de reformas económicas, sociales y políticas con
las que Japón pretendía progresar como nación y equipararse a
las potencias occidentales del
momento.1 En este contexto, surgieron a partir de la segunda mitad de la década de 1870 diversos grupos de tendencia liberal que consideraban insuficientes las reformas emprendidas hasta el momento y que
reclamaban mayores derechos
además de la formación de un
sistema de gobierno representativo. La presión al régimen fue en
aumento hasta que en 1883
el emperador Meiji anunció la
redacción de
una constitución que entraría en
vigor, como muy tarde, en 1890.
La noticia descolocó al movi-
miento liberal, que se fragmentó
en numerosos partidos y perdió
la fuerza que habría tenido de
haberse mantenido unido.
El proceso de elaboración de la
constitución empezó en 1885
tras la creación de un gabinete
ejecutivo presidido por Ito Hirobumi, un antiguo samurái. Ito
estudió varias constituciones
europeas y se decantó por el
modelo prusiano, un país que
tenía una posición destacable en
Europa y un modelo parlamentario que se adaptaba a los intereses de Japón. Los japoneses
querían una constitución que
garantizase el poder imperial a
la par que las instituciones y el
juego político.