ENTRA AL "TERCER PISO"
CON FINANZAS ESTABLES
Las personas que quieren llegar a la jubilación con un buen colchón económico y poder
vivir holgadamente, serán las que mejor ahorren durante sus años productivos
La vida da muchas vueltas y las
generaciones van cambiando.
Si eres millennial, entenderás
el cambio de pensamiento para
lo que “deberíamos” de hacer
o lograr a los treinta. Y es que
anteriormente nuestros padres
esperaban que, a esta edad, pudieran
estar casados, con hijos,
con una casa propia y, en general,
una vida organizada, aunque
con ciertas deudas “fuertes”.
Manténte al tanto de tu cuenta
Es importante estar al pendiente de tus saldos, para tener en mente
cuánto y en qué gastar. Es recomendable revisar tus estados de cuenta al
inicio y al fin de la quincena.
Recuerda la regla 70-30
La recomendación para ahorrar efectivamente es destinar el 70% de tus
ingresos a los gastos fijos que pueden ser vivienda, educación, salud,
transporte o alimentación y el 30% restante al ahorro, entretenimiento y
pago de deudas. Ajusta tu estilo de vida a los ingresos fijos.
Pero este sueño ya no se comparte
con algunos millennials.
Actualmente los treinta significa
alcanzar cierta estabilidad
financiera; sin embargo, aunque
muchos de nuestra generación
sueñen con alcanzar la vida que
desea al llegar al “tercer piso”, el
hecho es que no muchos están
acostumbrados a ahorrar.
Según los datos de la Encuesta
Nacional de Inclusión Financiera
(ENIF), más de la mitad de
los mexicanos (56%) no ahorra
habitualmente, y quienes lo hacen
(43.7%) recurren a métodos
informales, como lo son guardar
dinero en casa, tandas, préstamos
familiares, entre otros.
Por ello te daremos algunos
consejos para ahorrar y aprender
a manejar tu dinero inteligentemente.
Sigue estos tips
para iniciar este hábito que seguro
te hará llegar a los treinta
sin tantas preocupaciones económicas.
La importancia de un hobbie
El tiempo libre siempre acarrea una que otra mala decisión. Las compras
no son un hobbie. Así que cada que tengas ganas de comprar algo, pregúntate
si realmente lo necesitas o si puedes esperar a comprarlo cuando
realmente te lo permita tu presupuesto. Entretener la mente en otras
cosas siempre funciona.
Establece metas
Fija fechas o periodos en los que destines dinero a tu “guardadito”. Trata
de hacerlo como un fondo de ahorro para cualquier imprevisto. Es recomendable
que este fondo sea de entre 3 y 6 meses de sueldo guardados
para hacer frente a cualquier eventualidad.
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