Cómo hacer arena mágica casera
Necesitaremos:
* Arena fina. Si vivís en la costa, os resultará sencillísimo conseguirlo, tan solo deberéis acercaros a la playa y rellenar una botella. Si vivís en ciudad, os toca buscarla. Nosotros tenemos un parque al lado de casa el cual está relleno de un símil de arena de playa, no llega a ser tan fina, pero para el experimento nos vale.
* Harina de maiz (Maizena).
* Una cuchara y un bol
* Un vaso
* Agua
Paso a Paso
Echa en el bol un vaso y medio de arena, después vierte un vaso de Maizena y remueve todo muy bien. Tienes que conseguir que no haya grumos y que estén perfectamente mezclados los dos ingredientes.
Después tocará ir añadiendo el agua poco a poco. Calcula que necesitarás medio vaso aproximadamente, así que no lo eches todo de golpe, mejor hacerlo poco a poco e ir viendo qué textura vamos consiguiendo.
Verás como se va haciendo un mazacote, pero oh, sorpresa!, también es blando y podría decirse que casi líquido.
Amasad con las manos, estrujad la arena, dejadla escurrir entre los dedos, formad bolas...
La sensación es genial, sólida y blanda a la vez.
Hemos descubierto que quizás no tiene la misma textura que las arenas mágicas que venden en jugueterías, pero como experimento casero es muy divertido y los niños se lo pasarán genial.
¡Además no mancha!
Cuando terminen de jugar con ella, podéis guardarla en bolsas con autocierre, de manera que la podéis volver a sacar para jugar en cualquier otro momento.
THEDIYMAGAZINE ABRIL
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