18
June 11, 2019 | The Valley Catholic
NOTICIAS EN ESPAÑOL
El Obispo Oscar Cantú Celebró el 25 aniversario de su Ordenación Sacerdotal
Por Liz Sullivan
Menos de tres semanas después de
asumir el cargo del tercer Pastor de la
Diócesis de San José, el Obispo Oscar
Cantú celebró el 25 aniversario de su
ordenación sacerdotal.
El 21 de mayo se celebró la misa de
Acción de Gracias en la Basílica Cat-
edral de San José.
El Obispo Cantú fue ordenado sacer-
dote para la Diócesis de Houston el 21
de mayo de 1994 por el entonces Obispo
Joseph Fiorenza.
“Hoy estoy muy agradecido por
los innumerables compañeros en el
viaje de los últimos 25 años, laicos y el
clero, que me animaron, me amaron,
me guiaron, me hicieron amigo en el
camino”. Dijo el Obispo Cantú du-
rante su homilía. “Desde Houston a
San Antonio, a Las Cruces, estoy muy
agradecido a quienes me apoyaron
con amor, amistad y honestidad en
el camino”.
El Obispo Cantú fue nombrado
Obispo Coadjutor de San José en julio
de 2018 y asumió formalmente el cargo
de Obispo de San José cuando el Obispo
Patrick J. McGrath se retiró el 1 de mayo
de 2019.
“Estoy especialmente agradecido
por la amable bienvenida que recibí
en San José de parte del Obispo Mc-
Grath y su personal en la Cancillería”.
Dijo el Obispo Cantú. “Me he sentido
encantado por la amabilidad y hospi-
talidad al haber visitado las parroquias,
escuelas, agencias y comunidades de
toda la diócesis. Estoy agradecido por
el trabajo del (fundador) Obispo Pierre
DuMaine y la sana colaboración que
recibió de hombres y mujeres laicos,
hombres y mujeres religiosos, y diáco-
nos y sacerdotes. Cruzando a través
del Valle de Santa Clara varias veces
durante los últimos meses, me ha en-
cantado la belleza natural que rodea a
este valle: solo puedo imaginar lo que
una vez fue: la delicia del corazón del
Valle. Durante su homilía, el Obispo
destacó varias áreas de enfoque para
él y la Diócesis en el futuro.
Son las Siguientes:
• Realidad Multicultural
• Formación de los Laicos
• Escuelas Católicas
• Una Cultura de Vocaciones
• Una Cultura de Encuentro
• Cultura de Innovación
(Para una descripción completa
de estas iniciativas, vea la copia de la
Homilía del Obispo en la página).
“Estas iniciativas y programas
específicos son parte de una preocu-
pación y un alcance más amplio de
la iglesia local para dar testimonio de
Cristo en nuestras vidas, para predicar
en temporada y fuera de temporada”.
Dijo el Obispo. “Son parte de un es-
fuerzo más amplio para que podamos
encontrarnos nuevamente con Cristo
y enamorarnos de nuevo con nuestro
Dios. Son parte de un esfuerzo mayor
para proclamar la dignidad de la per-
sona humana desde el seno materno
hasta la tumba.”
Al término de la misa, el Obispo
Cantú hablo de nuevo sobre la ini-
ciativa de “Crear una cultura de
vocaciones”.
Para el Obispo Cantú este proyecto
comienza con nuestras familias. Cada
parroquia y escuela fue comisionada
con un crucifijo hecho especialmente
para este proceso. Al alentar a nuestras
familias a orar juntas y dialogar sobre
nuestra fe, nuestra esperanza es que las
generaciones más jóvenes abrirán sus
corazones y mentes al plan de Dios para
ellos y para la Iglesia.
El crucifijo debe pasarse de familia
a familia en su parroquia (aula a aula
en su escuela) semanalmente. Se puede
presentar a la nueva familia/aula al
final de la Misa del Domingo (semanal-
mente), lo que brinda la oportunidad de
mantener el tema de las vocaciones al
frente y al centro.
Homilía del Obispo Oscar Cantú
Misa del 25 Aniversario - 21 de Mayo, 2019 Catedral Basílica de San José
Hace veinticinco años, el día de
hoy, el entonces Obispo Joseph A. Fio-
renza me ordenó sacerdote en Houston,
Texas. Cuando abrí las palmas de mis
manos para que pudiera ungirlas con el
Santo Crisma, no pude evitar sentirme
abrumado por mi propia carencia per-
sonal por la magnitud del cargo que
debía emprender, y los efectos abru-
madores y sanadores de la gracia de
Dios en el sacramento. Al reflexionar
sobre mi humilde participación en el
sacerdocio de Jesucristo, lo he com-
parado con un teatro: el teatro de Dios;
tenemos la oportunidad de ser testigos
de primera mano de la obra de Dios
en la vida de muchas personas, y no
solo somos testigos de estos milagros,
sino que nosotros los sacerdotes somos
agentes sacramentales del amor y la
gracia transformadoras de Dios. Hoy
estoy muy agradecido por los innu-
merables compañeros en el viaje de los
últimos 25 años, laicos y el clero, que
me animaron, me amaron, me guiaron,
se hicieron amigos en el camino. Desde
Houston a San Antonio, a Las Cruces,
estoy muy agradecido a quienes me
apoyaron con amor, amistad y hones-
tidad a través del camino.
Estoy especialmente agradecido
por la amable bienvenida que recibí en
San José de parte del obispo McGrath
y su personal en la Cancillería. Me he
sentido abrumado por la amabilidad y
hospitalidad que he recibido al visitar
parroquias, escuelas, agencias y comu-
nidades de toda la diócesis. Estoy agra-
decido por el trabajo del obispo Pierre
DuMaine y la sana colaboración que
recibió de hombres y mujeres laicos,
hombres y mujeres religiosos, diáconos
y sacerdotes. Recientemente, tuve el
privilegio y la oportunidad de hablar
con los sacerdotes sobre la historia de
nuestra diócesis. Me manifiesto con
humildad y respeto ante la gran obra
que ha tenido lugar en los casi 40 años
de historia, e incluso antes del inicio de
la Diócesis de San José.
Recorriendo el Valle de Santa Clara
varias veces durante los últimos meses,
me ha encantado la belleza natural que
rodea a este valle: solo puedo imaginar
lo que una vez fue, ¡El Valle del Deleite
del Corazón!
Entre las muchas buenas obras que
se llevan a cabo en nombre de la iglesia,
deseo destacar algunas. Otros, estoy
ansioso por conocer más íntimamente.
futuro. Espero continuar fortaleciendo
y apoyando este importante ministerio
de formación para nuestros fieles laicos.
Un laicado formado en la rica tradición
de la iglesia y que está comprometido
con la vida de nuestras parroquias y
proyectos eclesiales, siendo esto esen-
cial para una iglesia vibrante.
compartir los valores de cada cultura
con la comunidad en general, para que
todos podamos beneficiarnos de estos
valores humanos y religiosos.
Realidad Multicultural
Al comenzar a caminar junto a
la iglesia de San José, me siento am-
pliamente motivado por la realidad
multicultural de nuestra iglesia local.
Creo firmemente que hay tesoros en los
valores familiares, tesoros de fe, tesoros
de devoción, tesoros de perseverancia
y determinación, tesoros en el suf-
rimiento que espera y en la esperanza.
Estos son tesoros para ser valorados,
protegidos, alimentados y compartidos.
Espero encontrar formas creativas de Formación de Laicos
Tenemos un tesoro maravilloso
en nuestro instituto de formación de
laicos. Estoy agradecido por la visión
que lo creó, el liderazgo que lo ha
guiado y los participantes que se han
enriquecido con él. Estoy agradecido
a la Universidad de Santa Clara por
la gran cantidad de formas en que
la universidad se ha asociado y ha
apoyado varios proyectos y ministe-
rios en la diócesis; Estoy ansioso por
continuar una asociación fuerte en el
Escuelas Católicas
Mi propia experiencia de las es-
cuelas católicas en Houston ha formado
mi visión y apoyo a la misión de la
educación católica. Mis hermanos y yo
éramos hijos de padres inmigrantes,
por lo que la mayor parte de nuestro
sistema de apoyo familiar y natural
estaba muy lejos. La parroquia y su es-
cuela, por lo tanto, se convirtieron como
un factor importante en nuestra familia
extendida. Compartimos los mismos
valores e ideales. Las escuelas católicas
prepararon a mis hermanos y a mí para
el éxito como padres, como líderes de
la comunidad, la industria y la iglesia.
Como familia de clase trabajadora, mis
padres no podían pagar el costo total
de la matrícula, ¡ciertamente no para
ocho hijos! Afortunadamente, a nuestra
familia, como a muchas otras, se les
ofreció tasas de matrícula subsidiadas:
pagando lo que podían pagar. Mis pa-
dres hicieron grandes sacrificios por
mis hermanos y por mí, ya que querían
que nos formásemos en el corazón de
Continua en la pagina 19