DIVINA REVELACION ALFA Y OMEGA LA DOCTRINA DEL
CORDERO DE DIOS LA DIVINA CIENCIA CELESTE
magnética, que la jerarquía superior ejerce amorosamente sobre la menor; en
los platillos voladores las relaciones entre ellos, nada de egoísmo contienen;
porque ellos no están sometidos a sensaciones de pruebas, como sucede con
la criatura humana; las sensaciones de ellos, juegan en todo instante con las
sensaciones del infinito; ellos viven un universo viviente; ellos no están
aislados ni desprovistos, de la fascinante comunicación entre ellos y la
materia; como lo está el hombre; los tripulantes de los platillos voladores
entablan a diario y en todo instante, divinas conversaciones con multitudes de
moléculas; exsisten en ellos un maravilloso entendimiento; que hace que la
filosofía y psicología en sus diarios ajetreos, sea angelical; y todo lo plantean y
lo analizan, desde el punto de vista del reino de los cielos; la meta suprema
para ellos es el reino; porque saben y lo ven, que lo del reino no tiene igual;
ellos penetran las causas de los reinos; porque el reino de los cielos, está
constituido por infinitas jerarquías de cielos y de reinos; nadie sabe donde
termina lo supremo; porque lo de Dios no tiene ni principio ni tiene fin; y
todos saben que el Eterno está en todas partes; y por sorpresa para todos, se
hace presente en cualquier instante, estando la nave en viaje, por
desconocidas galaxias y soles; ocurre que en virtud del divino libre albedrío de
Dios, él se aparece sin previo aviso; aunque algunas veces se hace anunciar
con tiempo de anticipación; todo depende de las determinaciones de su divino
libre albedrío; es decir que el Eterno se comporta tal como se comportan sus
hijos; esto es según el libre albedrío y las características que posea el mismo,
en sus hijos; y el Eterno es tan cambiante, como cambiantes en sus maneras
de ser, son sus criaturas; cuando el Divino Padre Jehová los visita, el todo
sobre el todo de la nave, se revoluciona; y todos están de fiesta y de gloria; la
divina presencia del Eterno, provoca verdaderos carnavales cósmicos, que no
tienen fin; el Divino Padre Jehová, expande su propia divina imagen, a
planetas, soles y galaxias; se hace tan expansivo, como lo es el universo; en
los platillos voladores, la divina presencia de Dios, provoca tráficos inmensos
de criaturas, que provienen de todos los puntos del universo; y todos le
aclaman, empleando en sí mismos, saludos y términos propios de sus
evoluciones alcanzadas; si la criatura humana estuviera presente en esas
muchedumbres, que alaban a Dios, la criatura humana se arrodillaría… lo que
otras criaturas no harían; porque sus maneras de adorar al que todo lo puede,
son distintas; es allí en donde se ven, los gestos más sorprendentes y las más
inauditas actitudes, tanto en lo físico como en lo mental; las jerarquías más
infinitamente evolucionadas, ningún gesto hacen; sus alabanzas al Eterno son
silenciosas y no menos grandiosas; tales divinos saludos a Dios, provoca খ