DIVINA REVELACION ALFA Y OMEGA LA DOCTRINA DEL
CORDERO DE DIOS LA DIVINA CIENCIA CELESTE
los magnetismos de cada mente solar, se ponen de acuerdo; el
desprendimiento de las que serán las moléculas, principia nó en el principio del
nacimiento de las moléculas mismas; porque éstas ya exsistían y lo que hacen
es acudir a que tal ó cual Padre Solar, las reencarne en una galaxia llamada
platillo volador; lo que las moléculas aprovechan en esta ley, es el poder
magnético de los soles vivientes; como en la creación de Dios, nada tiene
límites, es que esta ley es una de las tantas que exsisten; en las jerarquías
elevadísimas de los Padres Solares del macrocosmo, ellos crean a las
moléculas, en el instante mismo, en que se proponen crear una nave; y las
reencarnan en el instante mismo; en esta obra se explican sólo dos maneras
de crear un platillo volador; porque lo infinito de Dios, jamás puede ser
explicado todo, en ningún planeta del universo; porque todos los planetas
envejecen y desaparecen por cumplimiento de sus leyes físicas, y el relato
jamás llega a su fin; las moléculas nacen en infinitas formas y circunstancias;
nacen en mundos, soles, platillos voladores, y de toda idea mental que dá
lugar a planetas; lo molecular se inicia de una manera en que se puede decir,
que el todo sobre el todo del universo, crea en todos los instantes moléculas;
los principios de las infinitas moléculas no cesan jamás; la molécula y la idea
física, son como la semilla del universo; en las construcciones de platillos, se
especializan en lo del espacio; y en sus infinitos viajes ven y estudian otros
principios de moléculas, para ellas desconocidas; tal como la criatura humana,
siente fascinación por la exsistencia de otras criaturas en desconocidos
planetas; en la respectiva ley de lo que se es, se sienten unas mismas
sensaciones; lo que cambia es la forma física; en los platillos voladores
ocurren también dramas que son propios de sus leyes de pruebas; porque en