"Llegada a París, el jueves 3 de octubre a las siete y veinte de la mañana.
"Llegada por Monte Cenis a Turín, el viernes 4 de octubre a las seis y treinta y cinco
minutos de la mañana.
"Salida de Turín el viernes a la siete y veinte minutos de la mañana.
"Llegada a Brindisi el sábado 5 de octubre a las cuatro de la tarde.
"Embarcado en el "Mongolia", el sábado a las cinco de la tarde.
"Llegada a Suez, el miércoles 9 de octubre a las once de la mañana.
"Total de horas transcurridas, ciento cincuenta y ocho y media, o sea seis días y medio".
Míster Fogg escribió estas fechas en un itinerario dispuesto por columnas, que indicaba,
desde el 2 de octubre hasta el 21 de diciembre, el día de la semana, el del mes, las llegadas
reglamentarias y las efectivas en cada punto principal, París, Brindisi, Suez, Bombay, Calcuta,
Singapore, Hong-Kong, Yokohama, San Francisco, Nueva York, Liverpool, Londres, y que
permitía calcular el adelanto obtenido o el retraso experimentado en cada punto del trayecto.
Este método itinerario lo tenía de esta suerte en cuenta todo, y mister Fogg sabía siempre si
adelantaba o atrasaba.
Por consiguiente, inscribió también aquel día, miércoles 9 de octubre, su llegada a Suez, que
cuadrando con la llegada reglamentaria no le daba ventaja ni desventaja.
Después se hizo servir de almorzar en su camarote. En cuanto a ver la población, ni siquiera
pensaba en ello, porque pertenecía a aquella raza de ingleses que hacen visitar por sus criados
los países por donde viajan.
VIII
Fix había tropezado en pocos instantes con Picaporte, que todo lo examinaba y miraba, no
creyéndose obligado a no hacerlo.
-Pues bien, amigo mío -le dijo Fix saliéndole al encuentro-; ¿habéis visado el pasaporte?
-¡Ah! Sois vos -respondió el francés-. Muchas gracias. Estamos perfectamente en regla.
-¿Y os estáis enterando del país?
-Sí; pero andamos tan aprisa que me parece viajar en sueños. ¿Es cierto que estamos en
Suez?
-En Suez.
-¿En Egipto?
-En Egipto, perfectamente.
-¿Y en África?
-En África.
-¡En África! -Repitió Picaport KK