TEORIAS DE ENFERMERÍA EN SALUD MENTAL 1 | Page 35

Gabo se refugió en el consumo de sustancias psicoactivas y cierto día bajo el efecto del pegante y pastillas, sufrió un accidente cayendo de un árbol, lo que le generó un trauma que comprometió su medula espinal y fue diagnosticado con parestesia de miembros inferiores quedando condicionado a una silla de ruedas o “Carrito” como él lo llama, teniendo posibilidad de progresar usando prótesis que le resultan incomodas, sin embargo, este evento lo motivó a dejar de consumir algunas sustancias alucinógenas, pero no ha podido renunciar a la marihuana.

En Gabo se observa una gran fortaleza, él ve en sí mismo un hombre capaz de superar las adversidades de su vida, imaginándose de pie y caminando sin ayuda de nadie, es ahí donde identificamos la necesidad de conocer y de tener herramientas que le permitan enfocar sus metas, teniendo como base el interés por luchar, aprender, cambiar su estilo de vida y aprovechar al máximo sus cualidades y potenciales. Como enfermeros en proceso de formación y jóvenes entusiastas, motivados a seguir aprendiendo, con muchas expectativas por hacer bien nuestro trabajo, nos acogimos a esa disposición de mejorar, trazándonos como meta el lograr que Gabo se descubriera como persona, hijo, joven, mostrándole los recursos con los que cuenta como ser humano y los que le ofrece su entorno para abrirse camino en un mundo lleno de dificultades, pero también de cosas maravillosas que nos permite convertirnos en seres plenos y realizados.

En este momento se llevó a cabo nuestra labor, preparando y fundamentando las actividades en las cuales se le enseño a mejorar su diario vivir para fortalecer sus cualidades y potenciales, desarrollamos encuentros con actividades que buscaban el cambio en Gabo y aunque en momentos hubo frustración, seguimos adelante y a medida que avanzábamos en el trabajo fuimos soltando los miedos y los prejuicios, nos dimos cuenta que pequeños detalles hacen grandes cosas, el escuchar a las personas y permitir que exterioricen sus pensamientos y emociones les brinda confort y la sensación de ser queridos.

Al final del camino tanto Gabo como nosotros no éramos los mismos, nos quedó la satisfacción de haber aportado con nuestro conocimiento al bienestar de una persona que logró sumar la resiliencia en su diario vivir y de esta manera no dudar de él para salir adelante, esta experiencia nos deja además de la gratitud por parte de Gabo un crecimiento personal y profesional que seguirá forjándonos en nuestro sueño de ser enfermeros.

Autoría: Equipo de estudiantes Grupos K y L, V nivel