notificacion por parte de la compañía propietaria de la aplicacion Whatsapp (actualmente propiedad de Facebook) con un mensaje de alerta advirtiendo que su licencia gratuita expiraría y que para seguir utilizándolo sería necesario realizar un desembolso económico, no muy alto, 0,99 céntimos, pero aquello genero un auténtico terremoto que, afortunadamente, con el paso del tiempo ha quedado en una mera anécdota.
Sin embargo, si fue la punta del iceberg de esa tecnología que llegaba para quedarse, en la que en muchos casos, el producto era el usuario, sus datos concretamente. Coincidiendo con esa mentalización por parte de los usuarios, en los últimos años las empresas tecnológicas más punteras han conseguido, en casos muy concretos, revertir la política del 'gratis total en internet'. Spotify, AppleMusic, Amazon Prime, abrieron el camino para que los usuarios comenzaran a darle valor a los 'micropagos' por servicios que podían conseguir gratis a través de descargas ilegales pero con mucho más esfuerzo.