Tango y Cultura Popular ® N° 165 | Page 72

en un trabajo cualquiera, que se rodea de mediocres para asegurarse de que no le "muevan el piso", porque sabe que él mismo es un mediocre. Se explota la resistencia al cambio, y esto no es nuevo. Horacio Ferrer cuenta en su libro El gran Troilo que, cuando Pichuco estrenó Responso en Montevideo, uno del público le gritó "¡Gordo, dejá de tocar pasodobles!". 2.- Los que, en nombre de un supuesto "nuevo tango", se colocan en el extremo opuesto de los anteriores, es decir reniegan de los antecedentes. Entre ellos, los que pretenden fusionar "de prepo" el tango (que es producto de una fusión natural y evolutiva) con otros géneros, particularmente el jazz. Definía Pugliese: "El tango es una mezcla de lo campero con la expresión popular ciudadana. Se pueden levantar muchas cosas, por distintos rumbos. Se puede venir de Gardel, Bardi, Cobián, Maffia, Laurenz, pero nunca se pueden detener etapas, ni perder de vista las fuentes. El que quiere expresarse en tango tiene que remitirse a la continuidad, sin despegarse de ella. Lo demás no es tango. Es música, otra música." Y decía Atahualpa Yupanqui: "Para que vivan los hijos, no es necesario matar a los padres". 3.- Los músicos que escriben para músicos, que parecen creer que cuanto más notas tenga la partitura, mejor. Tienen como correlato a los bailarines "de escenario", para quienes lo importante parece ser la cantidad de figuras por segundo y no el baile en sí. Nuevamente cito a Yupanqui: "Hay gente que deslumbra y otra que alumbra, yo prefiero alumbrar". 4.- El llamado "tango electrónico", producto derivado de un estudio de mercado, una de las tantas piedras que pone en el camino la contracultura mediática. 5.- Los métodos de baile etiquetados también como "tango nuevo" que, en nombre de la técnica y de una supuesta prolijidad, desconectan totalmente al bailarín de la música y de la emoción. 6.- La soberbia con que se manejan muchos de los que defienden cualquiera de las posiciones descriptas. Bueno, con esto ya me granjee el odio de todos. Si me faltó alguno, me avisan...