Tango y Cultura Popular ® N° 164 | Page 8

El fraseo musical del tango La acentuación del tango Cuando escuchamos un tango, quizás la primera impresión que tengamos, esté vinculada a su potencia rítmica. Si prestamos atención notaremos que la marcación rítmica está a cargo de sonidos graves, bajos. Y sobre ésta se desarrolla una línea melódica expresiva y melancólica. Aquí tenemos una premisa fundamental para la interpretación del género. Si intentamos tocar un tango con un instrumento melódico no debemos acentuar rítmicamente la melodía. La acentuación está a cargo del acompañamiento, y sólo en pocos casos el canto tendrá un vínculo rítmico con aquél. Es imprescindible escuchar tangos cantados. Los cantores de tango jamás acentúan las palabras dejándose llevar por el ritmo acompañante. Se podría decir que la línea melódica del tango es un tanto autosuficiente, responde al sentido de su texto, y remarca aquéllas palabras que el intérprete considera más relevantes. Las grabaciones realizadas por el cantor Alberto Castillo con la orquesta de Ricardo Tanturi, son un ejemplo superlativo de vuelo melódico sobre base rítmica. Cuando consigamos manejar ese vuelo melódico, quizás entonces sí podamos acentuar breves pasajes, en especial finales de frase, o fragmentos de escalas ascendentes. Es tradicional en el tango instrumental exagerar el acento de esos breves pasajes, logrando un agradable contraste con el resto del desarrollo melódico.