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Salud animal
myMagazine/January, 2013
Poseer un animal de compañía es frecuentemente traducido como una adquisición de responsabilidades en la que se le debe brindar al animal todo lo necesario para su correcto desarrollo. Para el cuidado de un animal de compañía se necesita una correcta alimentación y un constante cuidado que le evite algunas enfermedades, además de cuidado médico y la imitación de su ambiente natural.
El poseer un animal como animal de compañía puede traer efectos positivos en la vida humana. El descenso de la presión arterial alta y de los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre son efectos físicos positivos que puede traer el poseer un animal de compañía. La interacción social que involucra el tener un animal de compañía ha demostrado una respuesta positiva al estrés mental, la depresión y los sentimientos de soledad, desembocando en un efecto placebo, que mejora la salud del poseedor.
Asimismo, recientes estudios en el Japón muestran que las personas que sufren enfermedades crónicas y poseen animales de compañía (ya sea que estas tengan pelo, plumas o escamas) parecen tener corazones más saludables que quienes viven sin un animal de compañía.