lleváis años solucionando problemas y dando
beneficios a vuestra Organización. Cada uno
de vosotros tiene habilidades que, combinadas
y lideradas de forma sinérgica, os ayudarán a
encontrar nuevas posibilidades, opciones para
salir del laberinto diabólico. Y, si usáis el sentido
común y aprovecháis el formidable potencial
del equipo que formáis, escaparéis de los
monstruos. No os quepa la menor duda.
demostrado antes. Que sean ellos los que os
teman.
No sé si lo mejor en vuestro caso será armaros
de utensilios de cocina para defenderos,
improvisar una bomba casera metiendo un
líquido inflamable dentro del microondas,
cavar una trinchera y poner estacas en ella o
pedir ayuda al viejo y sabio exorcista de la tribu
india. Eso dependerá de vuestras particulares
circunstancias. Pero sí sé algo con seguridad.
Si decidís quedaros quietos, esperando la
próxima previsión económica de Bruselas para
dar el siguiente paso en el desarrollo del equipo,
atenazados por el miedo a las consecuencias
de precipitaros por una decisión atrevida, os
estaréis tapando la cabeza con la manta en la
cama. Y el monstruo os comerá.
Date prisa. Haz algo, junta a tu equipo y
enfrentaos todos a los monstruos con vuestras
mejores armas y la capacidad que ya habéis
31