TALENTO MAY-JUN 2019 talentoMAY2019 | Page 25

Esta dinámica resulta útil durante un tiem- po, hasta que el valor simbólico del “fetiche” deje paso al premio emocional. Toma una hoja de papel y divídela en peda- zos (por ejemplo, veinte). En cada uno de ellos escribe un “premio”, algo que te haga ilusión y no suelas hacer diariamente (com- prarte ese pastel que tanto te gusta, darte un baño relajante de una hora ajeno al mun- do, una sesión extra de tu serie favorita de fin de semana en la playa, por ejemplo-). No se trata de sacar una bolita cada día (a no ser que quieras engordar 10 kg a base de pasteles…), sino de crear y reforzar el vín- culo entre una acción destacable y un auto- reconocimiento. Cuando haya transcurrido un tiempo, verás cómo ya no necesitas fa- bricar ni sacar más bolitas de la bolsa, poco a poco habrás cogido el hábito de valorar- te cuando tú mismo lo juzgues apropiado. Yo mismo tuve serios problemas de autoesti- ma en mi juventud, razón por la que conozco bien todos estos síntomas y sufrimientos. Y, de entre todos los beneficios que el coaching tra- jo a mi vida, el mayor, el más impagable, es el haberme enseñado a valorarme a mí mismo, como paso previo a ayudar a otros a auto-va- lorarse. Por eso creo tanto en esta disciplina. De hecho, cuando me certifiqué como coach hace más de once años me hice la promesa a mí mismo de ayudar en todo lo posible a las personas que no se quieren a sí mismas. Si te has visto reflejado en este artículo, no lo dudes. Acude pronto a un coach, porque sería triste que siguieras sufriendo cuando la solución a tu problema es tan agradable y -en muchas ocasiones- tan rápida. Piensa en tu cubo, analiza bien tu grifo y, si decides que quieres desatascarlo de una vez por todas, ha- zlo ya. Quererse es fácil, es barato y es GENIAL. Netflix…). Cuando hayas escrito un premio en cada pedacito de papel, haz bolitas con ellos y mételas todas en una bolsa o una caja. El día que hayas hecho algo que tú mis- mo percibas que está especialmente bien, o que hayas conseguido un reto, o que haya sido significativo por cualquier otro mérito, TIENES LA OBLIGACIÓN de ir a tu bolsa de premios, extraer una bolita al azar y cumplir lo que ponga en ella. (Una variante es divi- dir los premios en tres categorías: premios de bajo nivel, para logros más cotidianos; premios intermedios -una cena este fin de semana en un local de moda, por ejem- plo- para logros señalables; y premios de alto nivel, para logros muy relevantes -un 25