Summa Coaching 12va Edición 12VO EDICIÓN | Página 67
OACHING PARA
DIVORCIADOS Y FELICES
RCIARSE EN PAZ
Para empezar soy hijo de pa-
dres separados. Se separaron
cuando yo tenía cuatro años.
Mi recuerdo de aquellos días
eran discusiones entre ellos,
reclamos, quejas. Mi abuela
materna hablando mal de mi
papá. Y yo sintiéndome en me-
dio de un fuego cruzado. Tam-
bién recuerdo que yo decía
que me hubiera gustado tener
un hermano para compartir
aquella carga que por momen-
tos me agobiaba.
Esa historia que durante mu-
chos años conté (y me conté)
como una desgracia en mi vida
la pude re interpretar (gracias
al Coaching) como una Bendi-
ción cuando me enfrenté a mi
propio divorcio.
Mi ex mujer también había
padecido la separación de sus
padres. Se lo habían contado
entre llantos y también quedó
en una suerte de fuego cruza-
do que no se hizo más leve por
tener un hermano.
Estas dos “desgracias” se nos
revelaron como aquello que
no queríamos repetir con
nuestros hijos. Entonces, más
allá de nuestras diferencias,
acordamos un objetivo común
de por vida: Preservarlos de
nuestras discusiones y procu-
rar su felicidad.
Por este motivo, lo prime-
ro que necesité resolver, fue
cómo decirle a mis hijos que
iba a divorciarme. En-
tonces pedí Coaching.
Me senté a conversar
con mi coach y le
conté que mi mayor
angustia pasaba por
el miedo a generarles
algún trauma. Nece-
sitaba diseñar una
conversación que no
fuera traumática, ni
dramática o negativa.
si de ese modo nos podemos
llevar mejor”
Les dimos un mensaje positivo:
“queremos llevarnos mejor”
Una de las claves del acuerdo
que hicimos con mi ex mujer
es que siempre vamos a hablar
bien del otro.
con amigos y familiares res-
pecto de las situaciones con
nuestra ex pareja. Sobre todo
en los primeros meses que es
cuando hay más circunstancias
a resolver.
Divorciarse en PAZ y Bienes-
tar es posible. Aún en los ca-
sos más complejos. Para ello
es importante crear desde el
El proceso de divorcio es un
duelo muy particular ya que
la otra persona no
desapareció.
A esa conversación
le siguió otra con mi
ex mujer dónde nos pusimos
de acuerdo en los detalles de
la charla a tener con nuestros
hijos y así lo hicimos. Nos sen-
tamos los cuatro y le pregun-
tamos a Pedro si alguna vez
nos había escuchado discutir
o pelear. Nos dijo que alguna
vez nos había escuchado des-
de su cuarto. Le explicamos
que no queríamos que eso se
repitiera. Que nos pasaba algo
parecido a lo que le ocurría a él
con su hermano: “nos amamos
pero no estamos encontrando
el modo de evitar las discu-
siones”. Y queremos llevarnos
mejor. Por eso vamos a inten-
tar vivir en dos casas, para ver
Vamos a evitar que ellos pue-
dan escuchar alguna crítica,
queja o reclamo que tengamos
hacia el otro. Y algo muy im-
portante: le vamos a comuni-
car este acuerdo a todos nues-
tros amigos y familiares. primer momento una red de
ayuda y contención. Y la ayuda
que podemos recibir desde las
mejores intenciones de nues-
tros amigos y familiares en la
mayoría de los casos no es la
ayuda más adecuada.
Ya que muchas veces “con muy
buenas intenciones” se involu-
cran y hacen comentarios con
los chicos cerca y ellos escu-
chan todo. Y lo más grave es
que no sabemos cómo pueden
llegar a interpretar eso que es-
tán escuchando. Por lo tanto
tenemos que ser muy cuidado-
sos con los comentarios y las
conversaciones que tenemos Por eso recomiendo la ayuda
profesional en todos los aspec-
tos y circunstancias a resolver:
Un abogado especialista para
los temas legales; un psicólogo
si hay que tratar alguna patolo-
gía y un coach para acompañar
la montaña rusa emocional y
empezar a ver nuevas posibi-
lidades donde hoy solo se ven
dificultades.
@revistasummacoaching
2018
Como coach me ocupo de de-
jar bien en claro que no hay
una receta universal e infalible.
Creo que si existen algunos
puntos importantes a tener en
cuenta, y también creo en lo
irrefutable de los testimonios
personales porque inspiran a
otras personas que transitan
por situaciones similares. Es
por ello que les quiero com-
partir mi caso.
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