SOPLOS 1 - 2010 | Page 18

LEJANA TRIBU Seguías siempre al sol Sus arreboles te abrigaban y sabios llevaban tu alma, tu cuerpo y tu trabajo a tu hogar pasajero, a hundirte en letargo. Seguías las estrellas. Su mapa místico decía a tu rebaño cansado, a tu piel, y a tu sembrado, donde estaba la bonanza y a buscarla iban marchando. Y así seguías la luna tras sequías y tormentas, sabiendo que alcanzarías lograr una mejor cosecha, invocando ayuda divina desde el humo de una hoguera. Y… Dónde llegó tu marcha? Hasta dónde te adentrarte? Aún te escapas de las garras del ingrato tumulto de inmigrantes que asentó su arma soberbia sobre tus vastos arenales? Nadie quiere hacerte daño Nadie quiere que te pierdas. Quédate ahí: indefenso y mustio Sostente lo más que puedas para poder tomarte algunas fotos Y cobrar entrada a tus reservas!!!!