Justificación:
Nuestra comunidad vive actualmente las consecuencias de tiempos muy oscuros y conflictos del pasado. Día tras
día asistimos a la consumación de hechos violentos, situaciones de abuso, crisis de valores, y en general
decadencia progresiva de la estructura social.
Somos conscientes de que la peor actitud ante esta realidad es la pasividad, la indiferencia, o la huida. Por tanto,
creemos que si deseamos superar estas condiciones adversas, se hace imperativo tomar cartas en el asunto.
La situación jamás se solucionará por sí sola, por el contrario tenderá a deteriorarse, de no mediar intervención
alguna.
Dado que en todos los casos, sin excepción, el factor común resulta ser el humano, creemos atisbar una luz de
esperanza al tratar directamente con él como causal directa, como también como principal afectado. Que, en
tratando y logrando la más completa liberación posible de aquellos fantasmas que atormentan el alma de
personas que protagonizan situaciones dañinas para sí mismos y para otros, contribuiremos al logro supremo de
legar una mejor nación que la que hemos padecido por tanto tiempo.
Objetivos
Somos conscientes de que esta constituye, aparentemente, una labor quijotesca. Tenemos claridad suficiente
como para asumir que a pesar de nuestros mejores esfuerzos, las secuelas de décadas de conflicto, violencia y y
corrupción institucionalizadas, imponen una apabullante realidad, que pasarán generaciones antes que podamos
si quiera, aspirar a lograr una sociedad en convivencia armoniosa.