Semillas
Educativas
6.
Familia _ Iglesia
“La iglesia anuncia con alegría y convicción la buena nueva sobre la
familia en la cual se fragua el futuro de la humanidad y se concreta la
frontera decisiva de la Nueva Evangelización”.
Santo Domingo. 210.
La familia es la primera iglesia
doméstica, allí es donde aprende-
mos a conocer la verdad y a sentir
el fortalecimiento de los valores
espirituales, porque se vivencia la
presencia de Jesús y se fortale-
ce la unidad y la caridad, en una
fórmula de respuesta decisiva,
por medio de la cual fue creada y
constituida la familia en el mundo.
La familia es la continuadora de la
Iglesia en la tarea de extender el
mensaje de salvación a los hom-
bres, empezando su misión des-
de el hogar con sus integrantes,
para que promocionados lleguen
a la sociedad con sólidos princi-
pios humanos y cristianos, enfren-
tando con acierto los desafueros y
circunstancias de la vida, atinando
con seguridad el éxito que van
a obtener al lado de la mano de
Jesús, quien permanece fiel a su
promesa de cuidar la familia y ve-
lar por ella.
La iglesia como sacramento uni-
versal de la salvación, cuida y pro-
mueve a la familia, la invita a que
la ayude en su tarea de Evangelizar
y descubrir nuevos horizontes en
el mundo, formando hombres de
bien, con respeto de sus propias
30
identidades y el reconocimiento
de que son seres hechos para el
amor, la colaboración y la trascen-
dencia. La iglesia llama a la familia
para que, por medio de la oración,
el buen ejemplo y la práctica de
las virtudes cristianas, hagan hom-
bres nuevos, revitalicen el camino
y vayan de la mano, en la sagrada
misión de constituir un horizonte
nuevo, en donde sus miembros se
tiendan la mano y cesen los odios,
rencores y egoísmos que trazan
barreras impenetrables.
Todos nosotros somos Iglesia, for-
mamos parte de ella, somos una
comunidad de amor. Así Cristo
quiso que fuéramos cuando la ins-
tituyó con sus doce apóstoles y la
presencia de María entre ellos, de
ahí nuestra tarea: Fomentar espa-
cios; abrirnos a la realidad que nos
circunda y comprometernos viva-
mente a extender su acción hacia
los demás hermanos que viven a
nuestro lado. Si lo hacemos, esta-
remos cumpliendo a cabalidad con
los principios que ciñen a la iglesia,
especialmente a nuestra comuni-
dad de amor que es la familia, in-
sertada en el mundo, como mode-
lo y ejemplo de virtudes.
Semillas educativas. Orientaciones didácticas para la formación de la Infancia Misionera
desde la escuela.
PhD José Orlando Salazar Duque.