La última salida fue al poblado cántabro de Cabezón de la Sal. En la visita
entramos en las chozas vimos los utensilios que tenían y nos explicaron cómo
vivían nos dejaron una espada y practicamos la forma que tenían de obtener la
harina de las bellotas para hacer pan. A continuación hicimos nuestra propia
choza de barro.