Revista Usuré Antropología y Transformación Social | Page 48

REVISTA ESTUDIANTIL DE ANTROPOLOGÍA ca que ha experimentado este es- pacio. Del mismo modo, se debe hacer alusión a las relaciones de poder que se originan entre las personas funcionarias y quienes acceden al servicio, las cuales re- sultan influenciadas por el “cono- cimiento validado que conservan quienes laboran ahí”, en donde incluso la bata blanca se convierte en la investidura de poder que le- gitima estas desigualdades. Cabe resaltar que el androcentris- mo se define de la siguiente ma- nera: “El androcentrismo o sesgo masculino ha considerado inferior y femenino el cuerpo, la afectivi- dad y las emociones. Lo masculi- no fue definido como razón, como ser independiente del cuerpo y de la Tierra” (García, 1995, p.29), este tipo de discriminación se ve plasmado en la experiencia rela- tada por una de las participantes: “Yo fui al hospital, decidieron ope- rarme. El doctor y el enfermero se burlaban de mí y me decían que las contracciones no dolían tanto” (Entrevistada 25 años, 4 de se- tiembre de 2015). Las formas de reflexionar los fenómenos sociales y las des- igualdades, el procedimiento de cómo se catalogan las mujeres, cosificándolas en “buenas y ma- las”, justificando el acoso sexual callejero, junto con el método de cómo se construye el lenguaje se- xista, corresponden a situaciones que manifiestan la concepción descrita, la cual es cuestionada y 48 problematizada en el desarrollo por parte de las mujeres víctimas/ del presente escrito. protagonistas y así alcanzar rup- turas que conlleven a la transfor- Por otra parte, la alternativa que mación societal. ha surgido ante el parto hegemó- nico (en donde sucede la violen- Al mismo tiempo, se divisa de ca- cia obstétrica) y que, además, se rácter primordial generar discu- asume en este artículo, se vincula siones sobre la problemática de la directamente con el ejercicio del violencia obstétrica, las cuales se parto humanizado. Según Ara- engloben dentro del marco de los gón (2013), el parto humanizado o Derechos Humanos, incluyendo natural “se fundamenta en la va- la perspectiva feminista, en don- loración del mundo afectivo emo- de se perciba a las mujeres como cional de las personas, la conside- dueñas conscientes de sus cuer- ración de los deseos y necesidades pos. De igual forma, se reflexiona de sus protagonistas […] para to- que los movimientos sociales y, mar decisiones sobre dónde, cómo especialmente, el movimiento fe- y con quién parir […] (p.2). minista se consolidan en un espa- cio desde el cual se puede visibi- Asimismo, se plantea la necesidad lizar la problemática; por lo tanto, apremiante de brindar apoyo a se torna fundamental la inciden- cualquier iniciativa legal, jurídica cia de este movimiento en discu- y social que defienda los derechos siones sobre dicha manifestación sexuales y reproductivos de las de la violencia contra la mujer. mujeres; enfocándose en la vio- lencia obstétrica. Se cita el pro- Por último, se contempla inelu- yecto de ley nacional presentado dible impulsar iniciativas lega- por el diputado Mario Redondo, les, cuya finalidad corresponda a denominado “Ley para Proteger a sancionar la violencia obstétrica; la Mujer Embarazada y Sancionar cabe mencionar que estas guías la Violencia Obstétrica” (2015), legislativas se deben realizar to- en vista de que se señala como mando en cuenta la voz de cada una oportunidad tangible para in- una de las mujeres que han sufri- cidir en las políticas públicas. do violencia obstétrica, sin victi- mizarlas ni convertirlas en sujetas A modo de conclusión, se afir- pasivas. A su vez, se debe exigir ma que la violencia obstétrica, atención médica humanizada y al igual que todas las manifesta- de calidad; que garantice el cum- ciones de la violencia, se deben plimiento a cabalidad de sus de- erradicar por completo. Por esta rechos sexuales y reproductivos, razón, es importante visibilizar sin sesgos religiosos, políticos, dicha problemática con el objeti- ni moralistas. vo de provocar cuestionamientos