Revista Usuré Antropología y Transformación Social | Page 20
REVISTA ESTUDIANTIL DE ANTROPOLOGÍA
integren la visita a la Península de
Osa con el Museo de Sitio Finca 6
y con las antiguas fincas banane-
ras, así como también con las co-
munidades indígenas de Buenos
Aires, de la Casona en Coto Brus,
con su diversidad y especifici-
dad. Esto viene de alguna manera,
embrionaria quizá, empezando a
darse, pero la pregunta es una vez
más, ¿cómo integrar a estas comu-
nidades empobrecidas e invisibles
en este proceso? Entendemos que
la inserción pasa por esa capaci-
tación y por el emprendedurismo.
Usar el antiguo espacio bananero
como atractivo turístico, es otra
opción que convendría considerar,
para activar un polo económico
adicional en la región. En Finca
6 -11, donde todavía existe arqui-
tectura bananera, se podrían crear
áreas de eco-museo, donde los tu-
ristas puedan visitar estas antiguas
casas bananeras provistas de la de-
bida museografía, de modo que la
comunidad misma, o parte de ella,
se convierta en un eco museo, o
espacio habitado y museográfico
a la vez, donde los turistas puedan
adquirir alimentos o productos ar-
tesanales locales. También se ha
hablado de recrear un área de cul-
tivo de banano a la antigua usanza,
solo por razones museográficas, de
representación del antiguo mundo
bananero. Otros proponen crear
este centro turístico museográfi-
co bananero en Palmar Sur para
aprovechar el núcleo arquitectóni-
co allí existente y generar un lazo
cultural que se prolongue desde
Sierpe hasta este sitio, integrando
además los sitios arqueológicos
Finca 6 y Batambal. Todo este
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Con más de 50 años, las casas de Finca 6 atestiguan la arquitectura bananera.
Foto por: José Luis Amador.
desarrollo económico pasa por el
fortalecimiento cultural e identi-
tario de la región. Aquí es donde
conviene vincular la región de
Osa con las comunidades indíge-
nas de Buenos Aires y otras. La
cultura es riqueza en sí misma,
pero contribuye también a crear
riqueza económica.
Desafíos hacia el Sur
como el Estado, no estaremos
repitiendo esfuerzos. Uno ve que
las instituciones llegan, se hace
un taller y se hace un documen-
tal, ¿pero qué seguimiento tiene
eso y para dónde vamos? Creo
que cada uno está trabajando en
el espacio de lo que puede hacer
y con las condiciones que hay.
Pero considero que se necesita
un conocimiento más profunde e
integral de la región y algún de-
rrotero. Hago autocrítica, porque
a veces uno siente que hay que
hacer cosas de mayor envergadu-
ra o de mayor incidencia.
En medio de todo esto surge una
pregunta clave y es ¿cuál es el
plan de acción en la región? Yo
creo que en la zona todos los días
se están haciendo cosas con ma-
yor o menor éxito. Sin embargo, Necesitamos tener una visión más
uno se pregunta si los diferentes integradora. Yo pienso que debe-
actores, tanto la sociedad civil ríamos trabajar en la búsqueda de