Travesías Didácticas Nº 31 • Diciembre 2019 | Page 33

Les muestra y les lee las reglas del juego. Comienzan a probar el juego. Inicia la maestra de sección y la maestra celadora y de a poco van turnándose algunos niños y continúan jugando respetando el turno. Les presentan las fichas de los memotest (comercial) y les propone ir a las mesas a jugar entre ellos. Colocan un juego por mesa. En un principio les dice que se sienten como quieran pero que nadie quede solo, realiza algunas sugerencias en cuanto a la ubicación de algunos niños desde lo cualitativo y cuantitativo con la intencionalidad de que niños con mayor capacidad para realizar dicho juego puedan ayudar a otros; con esta conformación heterogénea se favorece el aprendizaje entre los integrantes del grupo. Observando a una niña que ha tomado un liderazgo importante en su grupo, interviene la maestra de sección y le sugiere que deje que los compañeros puedan tener tiempo para pensar que ficha quieren elegir; en otro caso una niña solicitó dejar el juego y la maestra celadora le ofreció ayudar a niños en otra mesa. Estableciendo algunas conclusiones, podemos sintetizar que: Si pensamos en la importancia de realizar tareas en pequeños grupos y los modos más interesantes de concretarlas, podemos decir que determinadas modalidades no las favorecen, no generan autonomía ni posibilitan las interacciones que son parte fundamental de las tareas en los subgrupos; por ejemplo: si el docente reparte el material, indica y pauta toda la actividad sin dar lugar a las conjeturas y a la toma de decisiones por parte de los alumnos, si los niños permanecen sentados esperando que el docente indique que ya pueden comenzar. Cabe aclarar que muchas veces los alumnos se encuentran sentados todos juntos en las mesas pero esto no implica necesariamente un verdadero trabajo en grupo, con los otros, sino el desarrollo de una actividad individual aunque compartiendo el espacio…si bien esto puede ser necesario y positivo en algunas oportunidades, no se refiere a esto la propuesta de trabajo en subgrupos. Es importante volver a destacar que los materiales al alcance de los niños, la organización del grupo para acceder a ellos, las decisiones autónomas y compartidas en cuanto a las acciones a desarrollar, la distribución flexible y equitativa de los roles de cada uno … son aspectos fundamentales en este tipo de propuestas. Como se explicitó, si el docente centraliza las tareas, se ocupa de repartir uno por uno los materiales a cada niño y cada subgrupo, controla directamente el accionar de los alumnos… las fortalezas del trabajo en pequeños grupos se pierde. Por otra parte, la propuesta se transforma en una tarea imposible de abordar ya que 31