Travesías didácticas Nº 29 • Diciembre 2018 | Page 30

La vieja discusión... Margarita Penadés actualmente recuperadas y resignificadas para orientar las prácticas de enseñanza en contexto, considerando al docente como constructor de su propia práctica en un “espacio de autonomía relativa que es el que le permite contextualizar la enseñanza (…)” 3 Los modelos didácticos que respondieron al viejo paradigma prescriptivo-normativo dejaron una profunda marca en la tarea docente, ello queda a la luz al ver aún la presencia de una racionalidad instrumental en un docente abstracto y universal, que al igual que otros docentes salen a la búsqueda de técnicas que le permitan orientar el aprendizaje de sus alumnos/as. Sin duda, hoy estamos cuestionando esa racionalidad dominante, porque entendemos que la forma de ver e interpretar el mundo ha cambiado, lo que hace que ya no sea posible enseñar como lo hacíamos hace un tiempo atrás. Es imprescindible que revisemos nuestras prácticas en el marco del nuevo paradigma que nos posiciona en un lugar privilegiado, en cuanto que hoy tenemos la posibilidad de proporcionar conocimiento al campo de la enseñanza desde las prácticas innovadoras, creativas, y reflexivas que llevemos a cabo. Desde este lugar, asumamos entonces una posición crítica frente a la propuesta de Juego Trabajo, interpretemos la teoría y adecuemos nuestras prácticas a los contextos particulares de actuación. Sabemos que la misma ha sufrido cambios en el modo de realización de su práctica ajustados a las tendencias pedagógicas del momento y a los contextos propios de cada región. Así, cada tendencia fue dejando huella sobre esta modalidad que ingresa a las prácticas pedagógicas del jardín de infantes de la mano del movimiento de la Escuela Nueva, en la década del ´50 en nuestro país, a partir del “Programa guía para el jardín de infantes” elaborado en 1957 desde el Consejo Nacional de Tucumán y sustentado en las ideas del texto estadounidense “La vida en el jardín de infantes” escrito por Wills y Stegeman, que marcó el origen del juego trabajo en nuestro país, incluyendo en su propuesta de trabajo “actividades de diferente tipo: dramatización, construcciones, modelado, pintura, armado de rompecabezas, lectura de libros, etc. propiciado por las distintas clases de materiales organizados en rincones o sectores; se realiza diariamente y se estructura en cuatro etapas: “planeamiento, trabajo, ordenamiento de materiales, y evaluación e intercambio de trabajo” (Wills y Stergeman, 1957)” 4 . A la hora de repensar el Juego-Trabajo en las salas, resulta significativo visualizar el tiempo histórico-social en el que se ha ido desarrollando para comprender las diferentes formas que fue adoptando y a partir de ello, comenzar a pensar nuevas respuestas para esta problemática en las que “(…) el juego del niño y la enseñanza de contenidos (…) se transformen en el 3 SPAKOWSKY, Elisa (2010) en “Las prácticas actuales en la Educación Inicial”, PITLUK, Laura , 2013. Ed. Homo Sapiens, pág. 139. 4 MALAJOVICH, Ana. (2000), Recorridos didácticos en la educación inicial. Buenos Aires. Ed. Paidos. 28