Revista TodoPirque Junio 2020 | Page 7

que debiera ir de la mano de la observación detallada de las estrategias y decisiones que el mismo bosque está tomando. Observar detenidamente sus estrategias de adaptación y hacernos parte del proceso podría llevarnos a tomar decisiones realmente positivas para la conservación y resiliencia del entorno que formamos parte, agregó Ignacia. PAULA DÍAZ LEVI PARA LADERA SUR En un artículo de Paula Díaz Levi, en www.laderasur.com, se expuso que para conocer las implicancias de este fenómeno, un grupo de investigadores analizó los bosques mediterráneos entre el norte de Santiago y el límite sur del cordón de Cantillana, desde la costa y precordillera de los Andes, con el objetivo de comprender cómo varía geográficamente la resistencia de estos bosques frente a la sequía que comenzó en 2010 en la zona central. El trabajo, publicado en la revista Ecological Indicators, comparó las diferencias espaciales en el verdor de los árboles entre los años 2000 y 2017, revelando que al menos un tercio de estos bosques sufrió la pérdida de verdor y, con ello, de su vigor. “Estos análisis nos permitieron detectar que un tercio de los bosques han sido afectados por la megasequía, pero también un efecto de ‘refugio’ ante las sequías que proveen los fondos de las quebradas debido a la acumulación topográfica de humedad. Sin embargo, nuestras mediciones fueron hechas hasta el verano de 2017, y a raíz de que la sequía ha continuado, es razonable pensar que ni siquiera estos refugios han sido suficientes para proveer resistencia a los bosques mediterráneos. Hemos observado que en el año 2019 hay un decaimiento mayor y más extensivo pero que aún estamos analizando”, explica Alejandro Miranda, autor principal ONG Conservación Andina En conjunto con Colorado State University JUNIO 2020 7