Revista Summa Coaching 13 Edición EDICIÓN 13 | Page 46

> ARTE Y TRANSFORMACIÓN SALVATE A TI MISMO Por: Ana Gabriela Pedroza Galván Master en Educación, especializada en acompañamiento de adolescentes y Programación Neurolingüística A 46 unque ahora ca- minar te parez- ca natural y lo hagas sin pen- sarlo. La reali- dad es que en algún momento de la vida no fue así. Tuviste que caerte muchas veces para poder darte segu- ridad. Lo mismo sucede a lo largo de tu vida, cuando se existen conflictos que creemos no poder resol- ver. Salvarse a sí mismo es un camino de auto- conocimiento y profun- da reflexión. A lo largo de la vida he observado que la fe en uno mismo es la anestesia más po- derosa para calmar las penas de la vida, pero desgraciadamente no todos cuentan con ella, y no disponen de una fe tan potente como para transformar el dolor en fuente de paz. Por eso, en este espacio, te iré mostrando los pa- sos, desde una perspec- tiva humana, para lograr tu propia salvación. No hay especialista que con sus análisis o terapias pueda liberarte del su- frimiento humano. Sal- varse es el arte de vivir y este arte se aprende viviendo. Eres tú mis- mo el que puedes y de- bes salvarte a ti mismo; eliminando la angustia recuperando la tranqui- lidad de la mente y el gusto de vivir. Cuando tomas concien- cia de que todo ser hu- mano es el portador de extraordinarias capa- cidades, que habitual- mente están dormidas, y una vez provocadas y puestas en práctica, este puede mucho más de lo que te imaginas. Hay que comenzar por creer en uno mismo en la capacidad que se tie- ne de salvación. Existen personas que son incapaces de rela- cionarse socialmente, otras, logran hacerlo pero con enmascara- miento, pero interior- mente cargan tristeza y dolor. Habrá otras que sin tener síntomas pato- lógicos pasan la vida con una constante agonía, como insomnio, depre- sión, y van por la vida dando explicaciones ex- ternas; pero realmente ese no es su problema, el verdadero proble- ma radica en la falta de aceptación, la terrible sensación de que la vida se les está yendo en- tre las manos, una vida sin vida. Son personas que no saben contestar cuando se les pregun- ta por su razón de vivir, un vacío oprimente, un desgano general y no saben por qué.