Revista semillas de paz edición 2019 Revista edición 2019 | Page 69
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Espacio para el vi-
deo
Antonio Nariño Filósofo y revolucionario
Es un libro escrito por Enrique Santos Molano, este
libro nace de otra obra del mismo autor que se ti-
tula Las Memorias Fantásticas (2003) que es la
historia novelada de Antonio Nariño y tuvo tanta
importancia que los fanáticos de la historia que-
rían conocer mucho más de la historia de Nariño,
entonces él recopiló los documentos de su inves-
tigación y realizó un trabajo más académico, con
excelentes fuentes.
Este libro nos lleva a conocer profundamente la
imagen de Nariño, su personalidad, y toda su ges-
ta porque en cierta forma él es el padre de la pa-
tria colombiana: traduce los derechos del hombre,
crea uno de los primeros periódicos (o el primero),
tiene una de las dos imprentas que había en esa
época y por eso fue perseguido y encarcelado.
Fue un hombre que pasó más tiempo en la cárcel
que en su propia familia.
Los Comuneros, escrito por: Antonio Garcia
No tiene que ver con el proceso independentista, pero
se puede decir que es el inicio, es un retrato acerca del
proceso de revuelta que hubo con el prócer colombia-
no José Antonio Galán y que va a ser el comienzo de la
inconformidad con los españoles y de los procesos que
se dieron a lo largo de la independencia.
Cabe resaltar que durante el proceso de la revuelta de
los comuneros Antonio Nariño era un joven soldado del
ejército español y él se dio cuenta de las traiciones que
le hicieron a los comuneros y de todo lo que va a pasaría
alrededor de la figura de Galán, su descuartizamiento y
su posterior repartición de partes de extremidades por
cada lugar del reino como una forma de escarmiento.
La Pola, escrito por: Pedro Claver Téllez
Es un retrato, un acercamiento a esa imagen de
Policarpa Salavarrieta, la joven revolucionaria de
la independencia, que más que tomar parte a nivel
de batallas, peleas o luchas, ella era de cierta ma-
nera una espía, capaz de entrar en lugares donde
los otros personajes como Nariño, Sinforoso Mutis,
Pedro Fermín de Vargas o José María Carbonel no
podían porque ya los tenían muy identificados.
Para poder recopilar información y mover mensajes
de aquí para allá, ella realizaba diferentes labores
que se reservaban a las mujeres como los oficios
de la casa y todas esas equivocas ideas del papel
de ellas en la sociedad, para ese entonces, no eran
aptas para participar en política ni en eventos mili-
tares
Murió muy joven, de 22 años y es uno de los iconos,
una mujer muy verraca en esa época.