Por Federico Levy
Entrevista con Dante Spinacci
CONOCIENDO SOCIOS
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LA REVISTA CRÍA POLO ARGENTINO ESTUVO EN CONTACTO CON DANTE SPINACCI, JUGADOR DE PATO Y DE POLO Y APASIONADO POR LOS CABALLOS. DESDE SUS INICIOS HASTA EL PRESENTE. UN REPASO POR SU VIDA CRIANDO Y DONDE ASEGURA QUE“ EL CABALLO BUENO DE VERDAD JUEGA AL PATO Y AL POLO BIEN”.
FUE UN INVIERNO CORTO, CON FRÍOS INTENSOS, ¿ CÓMO AFECTA ESO A LA PREPARACIÓN DE LOS CABALLOS PARA LA TEMPORADA? El clima de invierno es malo para los caballos. Pero hay que organizarse. Este fue un invierno húmedo. Por eso hay que estar organizado para evitar problemas mayores.
DANTE, ¿ QUÉ SON LOS CABALLOS PARA VOS? Para mí los caballos son mi vida. Es lo que sentí desde chiquito y lo dibujaba cuando iba al colegio en la primaria, siempre mi vida fue todo alrededor del caballo.
¿ CÓMO NACIÓ TU VÍNCULO CON LOS CABALLOS Y EL DEPORTE? Yo hice de todo un poco, pero con el deporte, empecé con el pato, que me gustó mucho y anduvimos bien unos años y para comercializar caballos que era mi medio de vida, me hice amigo del Gordo Moore, una de las grandes figuras del polo del mundo allá por el 79 y 80. Y todo su entorno con Jorge Mac Donough, Alberto Reinoso, El Tolo Fernández Ocampo y fueron mis comienzos en el polo, el polo de campo … y empecé con Nueva Escocia. Y ahí fue cuando descubrí este deporte apasionante. Después de eso, tuve la suerte de conocer a Federico Lalor, y me invitaba a taquear en el 81 y no paré más, les debo todo a ellos … mi trayectoria y la continuidad de nuestra familia en el polo, como mi hijo Pablo que siempre jugaba ahí con ellos en el campo y nos abrieron la puerta de una manera extraordinaria, gente de polo de verdad.
¿ CUÁNDO DEFINISTE TU INTENCIÓN DE SER CRIADOR? Siempre vendí muchos caballos a Remonta y Veterinaria, caballos de salto, de equitación, y a través de amigos siempre estuve con caballos y después con los de pato, que tenía algunos buenos, nos hicimos amigos con Alfonso Pieres y ahí ya empezaron a jugar el Abierto, como La Princesa, La Patada, eran yeguas que yo las jugaba en el Abierto de pato y él en el polo, él fue quien me dijo que me anote en la AACCP. Me puso en contacto con Bill Buchanan y ya no sé cuántos años, pero hace muchos que estoy junto a la AACCP criando caballos. Mi comienzo con la Asociación fue a través de Alfonso Pieres.