Hermanas salesianas como no decir gracias si a pesar de cada uno de los muchos obstáculos que tenemos desde nuestras infancias, cada una de ustedes con una sonrisa nos demuestra como dios escoge a sus hijas.
Decir gracias es muy poco para tanto esfuerzo que hicieron por cada uno de los que hoy nos despedimos de esta casa. Una casa con la cual aprendimos que con una sonrisa un gran problema termina, “gracias” por enseñarnos que a pesar de estar lejos de aquí “nuestra casa” siempre llevaremos el gran lema que nos identifica “ser buenos cristianos y honestos ciudadanos”.
Que cada parte que pisamos cumpliendo las metas que algún día nos proyectamos y algún día volveremos y no seremos los mismos, porque los que un día nos vieron crecer solo dirán que orgullosos estamos.
Es duro decir “adiós” a cada hermana que más que una amiga son una madre, son mujeres alegres, enérgicas, unas verdaderas religiosas preparadas y entregadas a cada uno de nosotros, capaz de escuchar con caridad, solidaridad y pensar en los más necesitados.
¡SIEMPRE SALESIANOS!
Anlly Galvis
Vanessa Delgado
HERMANAS SALESIANAS
13