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Puedes regañarlo (no gritarlo ni pegarle) si lo “atrapas” ensuciando en un lugar que no es el escogido, acuérdate que estas tratando de cambiar su patrón de conducta, así que si lo regañas luego de un rato el no entenderá tus reclamos. Para hacer que un cachorro o un perro adulto hagan sus necesidades fuera de casa trata de hacerlo apenas termine sus alimentos diarios. No confundas las salidas para hacer ejercicio o de recompensa con los momentos para que el ensucie.
Revista PEDIGRÍ | Edición No. 2
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