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a educarlo desde el primer día
le recordará el latido de su madre, y dormirá más tranquilo. Lo más recomendable, es recoger al cachorro por la mañana, para que tenga tiempo de hacerse al nuevo ambiente antes de que llegue la noche.
el lugar que ocupará en su nueva manada, es decir, en casa.
los ruidos y rutinas de la casa. No lo lleves de inmediato a conocer otros animales y personas, para que no se sienta intimidado, hablándole siempre y tratando de calmarle cualquier miedo, con palabras suaves y caricias.
Después permítele que visite otras zonas, Hay que tener especial paciencia en lo pero con supervisión, para evitar accidentes referente a que aprenda donde se encuentra y luego regresar a su sitio de descanso. A su baño, y aquí juega un importante papel la medida que vayan pasando los días, él mismo, paciencia del dueño, que tratará de anticiparse gradualmente, se irá introduciendo a su nueva a la necesidad del cachorro, esto es fácil, pues el cachorro siempre hace sus necesidades casa y adaptándose a su nueva familia. después de comer. En su primera noche, el cachorro puede aullar En cuanto a la alimentación, es recomendable porque extraña su viejo hogar y su camada. continuar con la que se le venía haciendo, ya que un cambio brusco en la alimentación Lo mejor es mantenerlo cerca su sitio para dormir, donde el cada vez se sentirá más puede alterar el funcionamiento normal de su seguro pues se irá impregnando de su olor, sistema digestivo, y cualquier cambio, debe lo cual hará que la reconozca. Si está en un ser realizado de forma gradual. Así se evita la área algo alejada, puede ponérsele cerca un aparición de cualquier desorden digestivo. reloj de tic tac, así el sentirá un sonido que
Revista PEDIGRÍ | Edición No. 1
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