revista nórdica Mitologia_nordica.1474443498 | Page 135
07 Alerta esté quien vaya a convite,
afine el oído y calle,
con la oreja escuche, con el ojo observe.
¡En guardia el sabio se tiene!
08 Dichoso el hombre que sabe ganarse
el elogio y la estima de todos;
malo será lo que queda callado,
metido en el pecho ajeno.
09 Dichoso el hombre que en tanto vive
de estima y cordura goza;
perverso consejo se obtuvo a menudo
salido del pecho ajeno.
10 No hay carga mejor para hacer el camino
que la mucha cordura;
no hay oro mejor que se tenga entre extraños,
es ella el recurso del pobre.
11 No hay carga mejor para hacer el camino
que la mucha cordura;
no hay lastre peor para andar por el llano
que el mucho beber cerveza.
12 La tan buena cerveza no es para nadie
lo buena que dicen que es,
pues más y más a medida que bebe
el hombre el juicio pierde.
13 La garza la llaman; ella en la fiesta
el juicio a los hombres roba;
en la hacienda de Gunnlod preso quedé
en las plumas de aquel pajarraco.
14 Ebrio quedé y borracho mucho
allá donde Fialar el sabio;
bien se bebió si después de la fiesta
el juicio a los hombres torna.
15 Callado y sensato el hijo de rey
y bravo en la guerra sea;
contento y gozoso esté todo hombre
hasta el día en que muera.
16 Espera el cretino vivir por siempre
si evita entrar en pendencias,
mas tregua poca le da la vejez,
si las lanzas sí se la dieran.