REVISTA MIRADAS - MIRADAS PERÚ EDICIÓN # 76 | Page 58

Otra ventaja es también obtener más espacio disponible para otras actividades y áreas para que los huéspedes puedan interactuar, trabajar o entretenerse.

La tecnología aplicada a la industria hotelera se está desarrollando tan rápido qué hacer predicciones puede resultar arriesgado. En hoteles de todo el mundo ya tenemos robots mayordomos, espejos inteligentes o pagos con dispositivos móviles.

El “Internet de las cosas” y el “Internet de Todo” aumentan la disponibilidad de información y datos para realizar decisiones y mejorar la experiencia del viajero que se conecta. Nuevas tecnologías como realidad virtual o impresión 3D tienen un gran potencial en los hoteles. Ofrecer más opciones para la entrega de comida, productos y servicios, o para ver y escoger habitaciones, son formas para que el huésped y el hotelera entiendan mejor entre ellos sus necesidades, y para satisfacerlas en esta nueva economía centrada en el usuario.

Quizás en un futuro cercano podremos hasta hacer puenting desde nuestra cama con unas gafas de realidad virtual, y mientras medimos cuántas calorías hemos quemado antes de imprimir unos zapatos nuevos para dar una paseo por la ciudad.

Pase lo que pase, será genial ser parte de ello.

HIGIENE TECNOLÓGICA

Parece ser que la tecnología será fundamental para controlar las nuevas medidas. Así lo cree Beatriz Ferreira, colaboradora de Control H&S, una empresa canaria que ha desarrollado una aplicación que asegura han presentado ya al Ministerio de Sanidad y que sirve como un control integral del establecimiento y de todos los requisitos que debe cumplir higiénico-sanitarios a tiempo real. Con varios años en tareas de dirección hotelera, indica que dentro de los hoteles se siguen protocolos de higiene y seguridad que a día de hoy están desfasados o, sencillamente, son “muy complicados de llevar a cabo”.

Mediante la app el cliente sabrá en todo momento qué medidas está aplicando el establecimiento. Algo que se hace a través de códigos QR que el cliente puede escanear y le van a proporcionar toda la información actualizada. “Al cliente ya no le valdrá saber que la camarera ha pasado por la habitación, que no hay polvo o que está la cama hecha. Eso ya no sirve, el cliente querrá saber qué productos se han aplicado, qué proceso se ha seguido, qué se ha limpiado, a cuántos grados se han lavados las cortinas o que el mando a distancia se ha envasado al vacío”.