REVISTA MIRADAS - MIRADAS ESPAÑA EDICIÓN # 08 | Page 30

COMEDORES ESCOLARES Y COVID-19:

PAUTAS DE HIGIENE Y SEGURIDAD

Cualquier actividad en la que se manipulen alimentos y/o agua tiene riesgo de contaminación a nivel físico, químico o biológico en algún momento de la cadena de suministro (preparación, incluyendo envasado y distribución).

En SAIA ofrecemos todo tipo de servicios que tienen el objetivo de identificar, evaluar y prevenir esos riesgos, hoy hablaremos sobre el retorno a las escuelas post Covid. Con la vuelta a las aulas, ahora en septiembre, llega la preocupación sobre la seguridad de los comedores escolares con la Covid-19. Puede haber quien se pregunte si es seguro dejar que sus hijos permanezcan en el centro escolar también a la hora de comer o es preferible que coman en casa.

Las diferentes comunidades autónomas se comprometieron a garantizar el transporte y el comedor escolar a los alumnos que lo necesiten adoptando todas las medidas de seguridad necesarias. Esto aplica tanto a colegios que cuentan con cocina propia como a los que recurren a un servicio de catering externo. A partir de este compromiso, cada comunidad autónoma establecerá medidas concretas de acuerdo con sus competencias en materia de educación.

Entre las medidas que se adoptarán, y que pueden cambiar según las necesidades de cada momento, están las de aplicar una serie de pautas de higiene y seguridad alimentaria para reducir contactos, además de las que ya hemos especificado anteriormente para situaciones de normalidad en este tipo de entornos.

Alimentos y transmisión de la Covid-19

Aunque ya se han publicado muchas noticias sobre esta cuestión, no está de más recordar que la actualidad no hay pruebas de que los alimentos y el agua potable puedan ser una fuente o una vía de transmisión de la Covid-19, según afirma la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) en un estudio realizado por la Associació Catalana de Ciències de l’Alimentació. Aun así, cabe recordar que un trabajador infectado puede contaminar con el virus los alimentos que toque o las instalaciones donde los manipula si está infectado y se toca con las manos la cara o estornuda o tose encima de un alimento o una superficie.

Pautas generales de organización

A rasgos generales, comunidades autónomas como Madrid o Cataluña han establecido que teniendo en cuenta que no todos los centros tienen las mismas instalaciones cada uno deberá analizarlas para decidir qué necesidades tienen para evitar tener que hacer rotación de alumnos que causaría perjuicios en la actividad escolar.

El comedor escolar estará activo desde el primer día lectivo. La tendencia será hacer más turnos de recreo y de comedor, y hacer coincidir en ellos a los alumnos de los mismos grupos estables para garantizar la trazabilidad de cualquier brote del coronavirus, sea en una mesa o varias.

Entre alumnos que no pertenezcan al mismo grupo que coincidan en una misma mesa, deberá dejarse un espacio adicional libre entre ellos, con una silla vacía, por ejemplo.

Las comidas se harán, preferiblemente, en el espacio habitual, pero podrán habilitarse si se requiere aulas u otros espacios para ese efecto.

Tras cada turno de comidas, deberá llevarse a cabo una limpieza y desinfección de las mesas, incluyendo el último turno.

Las comunidades también establecen la obligatoriedad de garantizar el lavado de manos antes y después del comedor y el recreo, y recomiendan situar dispensadores de gel hidroalcohólico a la entrada y salida de ambas actividades.

Por su parte, el Departamento de Educación de la Generalitat de Cataluña presentó a principios de julio su plan de actuación, que afecta a espacios docentes, espacios de comedor, cocinas, espacio de cantinas, etc.

La comida deberá servirse en platos individuales que no podrán ser compartidos entre alumnos. Esto aplica especialmente a ensaladeras o fuentes de comida para compartir.

No se pondrán en las mesas utensilios de uso común, como aceiteras y vinagreras, cestos de pan para toda una mesa, etc. El agua puede servirse en una sola jarra, pero deberá servirla siempre una misma persona adulta o bien siempre un mismo alumno durante toda la comida.

En los centros en los que como parte de su proyecto pedagógico los alumnos se encargan de tareas como poner o recoger la mesa, limpiar las instalaciones tras la comida, siempre deberán encargarse de esas tareas los alumnos de un mismo grupo estable. En los colegios en los que se sirva la comida mediante una línea de autoservicio, los alumnos deberán mantener la distancia de seguridad de 1,5m entre ellos en la cola.

Habilitar las aulas como espacio de comedor puede ser una buena solución como forma de minimizar los contactos con alumnos de otros grupos estables, y en este caso será imprescindible también limpiar, desinfectar y ventilar el espacio tras la comida. En el traslado de los alimentos es necesario seguir las pautas de seguridad alimentaria necesarias.

Por Luis Riera, director general de SAIA Seguridad Alimentaria.