Hace
En el año 1983, hace treinta y cinco
años, estábamos en la presidencia de
Belisario Betancur y la nación se veía en
un aprieto. Los años ochenta son crucia-
les para el análisis de la historia de nues-
tro país. Muchos sucesos marcaron esta
década, por ejemplo, la toma del Palacio
de Justicia en 1985 por parte del M-19.
Este brutal acontecimiento impulsó a un
gobierno que ya perseguía la paz a ha-
cerlo de manera más eficaz. La verdad es
que mediante diálogos y otras medidas,
el gobierno colombiano ha buscado la
paz con las guerrillas como las FARC,
el M-19, y el ELN para de este modo,
ponerle un fin al conflicto armado. Esto
se puede evidenciar claramente en 1990
cuando el entonces presidente Virgilio
Barco firmó un tratado de paz definitivo
con el máximo comandante del M-19,
Carlos Pizarro Leongómez. Este acto fue
seguido por la devolución de la espada
de Bolívar, que había sido robada en
1974 como primer acto de esta guerrilla.
Posteriormente, en 1991, el M-19 formó
parte de las elecciones de congreso, ob-
teniendo nueve curules para el Senado y
doce para la Cámara de Representantes.
La reintegración de la guerrilla a la so-
ciedad ha sido exitosa, ya que un candi-
dato presidencial, Gustavo Petro, es un
ex militante del M-19. La búsqueda de
35 años
todavía le quedaba mucho
camino por recorrer al país,
pero se hacía algo bien, se
estaba empezando a tomar
la iniciativa de alcanzar la
paz.
Armadas Revolucionarias de Colombia),
cuyos ideales estaban basados en el comu-
nismo de la Unión Soviética. Más adelan-
te, ya en la década de los setenta, surgió
un nuevo actor. El M-19 (Movimiento
19 Abril) creado a causa del desconten-
to por el posible fraude en las eleccio-
nes, que dieron como ganador a Misael
Pastrana sobre el ex dictador Gustavo
Rojas Pinilla. Es claro que la mentira y
la injusticia han separado a nuestra na-
ción, así que solo puedo esperar que la
verdad y la justicia logren unirla. Hace
treinta y cinco años todavía le quedaba
mucho camino por recorrer al país, pero
se hacía algo bien: se estaba empezando a
tomar la iniciativa de alcanzar la paz. Los
grandes cambios empiezan así, con una
persona que tiene el interés de mejorar el
mundo en algún aspecto.
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