1993-1994, Inicio del sistema de Casas en el CLN
construir para la sociedad colombiana
y para el mundo del siglo XXI. Creo
que la intuición luminosa de los ba-
chilleres del año 94 fue haber creado
las casas casi sin darse cuenta, con este
propósito. Los recuerdo entre las bru-
mas del pasado irrumpiendo gozosos
y triunfantes en mi oficina, con mi
diccionario de versión en sus manos y
con las palabras elegidas. Yo les había
propuesto que crearan cuatro casas y
eligieran tres capitanes por casa, pero
a Luisa le pareció en ese momento too
much and unnecessary bureaucracy, para
una comunidad de apenas unos seis-
cientos niños, de modo que las cosas
de cada batalla de Don Quijote de la
Mancha. También los profesores nos
hemos pintado alguna vez la cara y las
manos de rojo, de verde o de azul, para
meternos en esas cofradías y compartir
sus quimeras a lomo de Rocinante. En
los campos cataláunicos del inter casas
usted carga cada año contra nuevos
molinos de viento. ¿Y eso es todo?
No obstante, más allá de rivalidades y
emociones, lo que las casas y los capi-
tanes significan para la cultura noga-
lista es algo mucho más profundo. Por
esa arteria roja circula la savia de los
valores que esta institución se propone
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