Revista Los Escritores 1° Edición | Page 16

La Madre se enfrentó a su Esposo con tal de defender a sus hijos pero lamentablemente, ella fue golpeada y se desmayó por varias horas. Cuando ella despertó, lo primero que hizo fue buscar a sus hijos, pero al buscarlos por toda la casa, no los encontró ni a su Esposo. Muy desesperada, salió fuera de la casa y corrió bajo la tormenta llorando y gritando el nombre de sus hijos por varios días, meses, años, pero nunca los encontró. Un día, tras buscarlos por mucho tiempo, la Madre murió de tristeza. Tampoco se supo nada de los niños, ni mucho menos de aquel hombre que se los llevó. Desde ese entonces, el espíritu de esta Madre no descansa y todas las noches se le oye llorar y lamentar por los alrededores de los pueblos buscando a sus hijos. Las mujeres que logran oír los lamentos y gritos de la Llorona, corren asustadas rápidamente tras sus hijos para esconderlos de ella, por qué si los encuentra, se los puede llevar para siempre.